Alumnos de la Universidad trasladan sus clases al encierro contra los cortes de luz en la zona norte
- Unos 190 estudiantes de Psicología del Desarrollo han mostrado así su solidaridad con los vecinos de la zona Norte
Alumnos de la asignatura de Psicología del Desarrollo de la Facultad de Trabajo Social de la Universidad de Granada han dado sus clases este martes en la iglesia de San Francisco de la capital granadina, que acoge desde este pasado un lunes un encierro contra los cortes de luz en la zona norte.
Según ha indicado a Europa Press el Defensor de la Ciudadanía de Granada, Manuel Martín, unos 190 alumnos han mostrado así su solidaridad con este encierro, que tiene previsto prolongar hasta el próximo domingo, en compañía del sacerdote Mario Picazo, párroco de la barriada de La Paz.
En sillas dispuestas en un aula improvisada en las dependencias de la iglesia de los franciscanos, los alumnos han conocido más datos sobre esta problemática, y, en general, sobre la denominada «pobreza energética», en el marco de la asignatura que imparte el profesor José Luis Cabezas Casado.
Manuel Martín y Mario Picazo, que han recibido en estos días la visita de numerosos vecinos y representantes de entidades y partidos, reclaman con esta acción soluciones, tanto a las administraciones como a Endesa.
En el inicio del encierro, este pasado lunes, Martín sostuvo, en declaraciones a los periodistas que, «de todos los problemas que padece Granada, éste es el peor por injusto e inhumano», pues estos apagones afectan a centenares de familias, incluyendo «niños, ancianos y personas enfermas», que sí pagan sus recibos.
Se trata, según expuso, de una «emergencia humanitaria y social», pero el problema lejos de solucionarse «está enquistado y va de mal en peor».
Por su parte, fuentes de Endesa señalaron a Europa Press que siguen trabajando con todas las instituciones involucradas en buscar una solución a este problema, que según recalcaron, «no es un asunto eléctrico sino un problema social», en relación al fraude masivo que se produce por el cultivo de marihuana, lo que sobrecarga las instalaciones y obliga a la compañía a hacer «continuas inversiones» para reparar los desperfectos.
Además, este encierro se produce unos días después de que el Juzgado de Primera Instancia 15 de Granada haya admitido a trámite la denuncia colectiva presentada el pasado verano por vecinos y asociaciones contra Endesa alegando que no se están respetando los derechos fundamentales de los afectados.