El SAS ordena retirar miles de mascarillas donadas por Spiriman a los hospitales por no ser aptas para uso sanitario

• El médico youtuber conocido en redes sociales como Spiriman entregó miles de mascarillas y equipos de protección comprados en china directamente a profesionales sanitarios sin pasar por las Plataformas Provinciales de Distribución ni por los controles de las unidades de prevención de riesgos.
• La responsable de Prevención de Riesgos Laborales de SAS, Nuria Queraltó, ha ordenado la identificación de los trabajadores que han utilizado las mascarillas y proceder a su aislamiento preventivo y la realización de test rápido o PCR.

El SAS ha ordenado la retirada de las mascarillas Inuan KN95 FFP2 distribuidas por Spiriman a través de la Asociación Justicia por la Sanidad en centenares de hospitales, centros de salud y residencias de personas mayores en Andalucía y otras comunidades autónomas.

Las mascarillas, junto a equipos EPIs fueron distribuidas por toda España tras una campaña de captación de fondos puesta en marcha por el médico y cuya recaudación asciende por ahora a 900.000 euros aproximadamente, según él mismo ha indicado en sus redes.

En Granada, tanto en el Hospital Virgen de las Nieves, como en el Hospital Clínico, fue el propio Spiriman quien realizó personalmente la distribución de material, en su coche, según videos publicados por el médico.

En el Hospital Clínico, según ha informado la dirección del Hospital a la Junta de Personal, las mascarillas Inuan KN5 donadas por Spiriman «fueron retiradas hace dos semanas, ya que se trataba de una donación no controlada ni valorada por los técnicos de prevención de riesgos». El Hospital en su comunicación con la Junta de Personal no identifica directamente a Spiriman como el donante y la persona que entrega el material, pero sí que «fue un profesional quien las distribuyó directamente en la urgencias y en la UCI», y que fueron retiradas directamente en cuanto la dirección tuvo conocimiento. Sin embargo, según fuentes sindicales consultadas por este medio, el 50% de las mascarillas y de los equipos EPIs entregados por el médico fueron recogidas y usadas por el personal sanitario, que además hizo acopio para las siguientes jornadas de trabajo. La dirección del hospital dice que no puede dar más datos sobre la entrada de ese material porque no les llegó por la vía oficial, desde la Plataforma de Distribución ni como una donación, sino que fue directamente «un profesional quien hizo la distribución entre sus compañeros».

Sin embargo, en el Hospital Virgen de las Nieves la dirección no retiró el material entregado por Spiriman directamente en las urgencias, sino que los trabajadores dispusieron de el libremente hasta agotar la remesa entregada. En el hospital no hay constancia de la entrega de ese material, pero trabajadores consultados han confirmados la recepción de ese material hace unas semanas y que ellos mismos, sin ningún tipo de filtro ni control, repartieron el material pensando que cumplía con las normas de protección. El propio Spiriman grabó un video en las puertas de Urgencias del hospital tras la entrega del material informando de la entrega.

Desde la Delegación de Salud y Familias, extraoficialmente han confirmado que las mascarillas retiradas proceden de una donación «particular» directamente a los trabajadores y no han sido proporcionadas por la Subdirección de Compras ni por las Centrales de compras provinciales. Igualmente informan que se han enviado instrucciones a los centros para que identifiquen a los trabajadores que han utilizado dichas mascarillas y, según se determine, se proceda al aislamiento preventivo, realización de test rápido o PCR. Sobre la identidad del «particular» no ofrecen pistas, ni si es una empresa, un ciudadano o un trabajador del propio hospital.

Venta a farmacias

Hace unas semanas Spiriman hizo público un video jactándose de haber reventado el mercado de las mascarillas en España, al conseguir en el mercado chino precios muy baratos y se ofrecía para suministrar a farmacias, empresas e incluso al propio Ministerio de Sanidad. En un video posterior informó del número de farmacias que le habían realizado el encargo, en torno a 2.000 en toda España, por un importe cercano al millón y medio de euros. El modelo de mascarillas suministradas y en vías de suministro a las boticas son del modelo considerado no aptas por el SAS y que por tanto ordena ahora su retirada de los hospitales y centros de salud.

Antonio Mingorance, presidente de Bidafarma, la cooperativa andaluza que agrupa a la mayoría de las boticas de Andalucía y desde cuya plataforma de compras se realizan los pedidos de mascarillas y se distribuyen, ya avisó hace unos días a los farmaceúticos del riesgo que entrañaba la compra de material sin ningún tipo de control de calidad fuera de los canales oficiales.  Spiriman acusó a Mingorance de ser un «golfo»  y a los farmacéuticos de estar enriqueciéndose con la venta de mascarillas a precios desorbitados.