La UGR garantiza «contundencia» con los posibles casos de acoso y los llevará a la Fiscalía si se confirman
- Concretamente, la Unidad de Igualdad y Conciliación de la UGR está investigando la denuncia de una estudiante por supuesto acoso sexual por parte de un profesor contra el que posteriormente han testificado otras seis personas que han declarado haber sido víctimas de «conductas inapropiadas» en el espacio académico
La rectora de la Universidad de Granada (UGR), Pilar Aranda, ha garantizado que la institución será «totalmente contundente» respecto a los supuestos casos de acoso sexual por parte de un profesor que han denunciado siete estudiantes y ha avanzado que, en caso de confirmarse, se pondrán en conocimiento de la Fiscalía si es necesario.
A preguntas de los periodistas, Aranda ha señalado que tras tener conocimiento de este asunto, y «respetando totalmente la presunción de inocencia» de este profesor, se activó el Protocolo para Prevención y Respuesta ante el Acoso de la universidad. El asunto se encuentra ahora en manos de la Unidad de Igualdad y en la Inspección de Servicios.
Concretamente, la Unidad de Igualdad y Conciliación de la UGR está investigando la denuncia de una estudiante por supuesto acoso sexual por parte de un profesor contra el que posteriormente han testificado otras seis personas que han declarado haber sido víctimas de «conductas inapropiadas» en el espacio académico.
La primera alumna que ha denunciado sostiene que el profesor le pidió su teléfono el siete de marzo, tras unos días enferma, y que, en una tutoría, supuestamente le preguntó si se «masturbaba» y si «disfrutaba con el sexo». Le habría pedido que se «sentara a su lado» en lugar de «delante suya» y le habría dicho que su foto de perfil en la aplicación telefónica ‘Whatsapp’ era «muy provocativa».
Después de esto, la estudiante habló con el Decanato de la Facultad de Ciencias de la Educación y de la Unidad de Igualdad y Conciliación, tras lo que lo contó a su clase por si hubiera casos similares. A raíz de ello, han surgido nuevos testimonios.
La rectora ha dicho que están trabajando con «respeto a la legalidad pero actuando» con uno de los protocolos «más avanzados» que existen en la materia dentro de las universidades españolas. Si se comprueba la veracidad de los hechos, la institución prevé llevarlo a los juzgados o ponerlo en conocimiento de la Fiscalía.
La rectora ha defendido el trabajo que se ha realizado desde la universidad granadina en lo relativo a la prevención y en «convencer» de la necesidad de denunciar este tipo de situaciones. «Creo que se va perdiendo el miedo a las denuncias y es en eso en lo que tenemos que trabajar, por una sociedad más igualitaria, inclusiva y donde se respete totalmente con unas normas de conducta adecuadas lo que deben ser las relaciones entre personas», ha agregado.
No obstante, ha abogado por un cambio en la legislación, pues si bien ha remarcado que «hay que respetar la presunción de inocencia» también opina que se debe tener capacidad para tomar medidas preventivas y cautelares cuando se detecta un posible caso y ahora mismo no es posible.