Podemos-IU pide que el cobro de impuestos a hostelería y comercio se retrase a septiembre
- La formación tacha de “desmadre” la intención de seguir empobreciendo a los pequeños empresarios
El grupo municipal de Podemos-IU e Independientes denuncia la intención del equipo de gobierno de iniciar este trimestre el cobro de tasas e impuestos a la hostelería y el pequeño comercio, precisamente aquellos que están sufriendo en mayor medida las consecuencias de las restricciones a consecuencia del covid. El concejal de la coalición Paco Puentedura sostiene que “pasarle la factura ahora mismo, y en estas condiciones, es algo desmadrado, teniendo en cuenta la dificultad económica que están teniendo estos pequeños empresarios”.
Puentedura recuerda que el 2020 finalizó con restricciones a sectores como el de la hostelería, el comercio o el turismo, que el 2021 se ha iniciado con los mismos obstáculos y el panorama indica que se endurecerán aún más, con lo cual “no es razonable que por parte del Ayuntamiento se quiera aplicar el cobro de impuestos en este primer trimestre”.
“Estos negocios no han tenido tiempo de recuperarse, de tener ingresos ni posibilidad de poder respirar tras las restricciones, y si el Bipartito ahora los saetea con facturas, lo único que conseguirá será empeorar la situación económica de miles de negocios que generan miles de empleos en la ciudad”, añade el edil.
La formación exige así que el cobro se posponga al mes de septiembre para intentar dar un poco de oxígeno a estas pequeñas empresas, y pide al Ayuntamiento que “deje de ser una piedra en el camino”. Puentedura propone, además, que se permita el fraccionamiento de pagos desde septiembre hasta final de año. “Lo que se necesita es permitirles que puedan sobrevivir y entonces, que consigan satisfacer sus obligaciones fiscales con el Ayuntamiento”, ya que, por otro lado, la reducción del 20% en las tasas de terrazas, basura y kioskos “es claramente insuficiente, una cortina de humo para quien no puede pagar ni el total, ni el 80% porque no tienen ingresos”.
Aplicar esta medida, mantiene el concejal, no requiere una modificación de la Ordenanza Fiscal, por lo tanto, “se trata de mostrar flexibilidad y sensibilidad a negocios a los que les supone miles de euros”. Puentedura sostiene que “un bar o una cafetería pueden llegar a pagar 8.000 euros al año, no es difícil de entender el alivio que le puede suponer el fraccionamiento a la familia que está tras la barra”. El edil informa de que si se cumple esta obligación de cobro, solamente se incrementará la morosidad y en muchos casos, será de muy larga duración ya que habrá miles de empresarios que tendrán que cerrar.
El concejal sostiene que, por otro lado, el retraso y el fraccionamiento del pago de tasas no repercute en las arcas municipales ya que el Plan de Ajuste permite tener un “colchón de 13 millones de euros que permita el rescate a estos miles de granadinos y granadinas sin perder liquidez en el Ayuntamiento”.