CSIF lamenta que Granada se encuentre entre las cinco provincias del país con mayor tasa de paro a causa del coronavirus
- El sindicato reclama el fortalecimiento de los servicios públicos no solo como generadores de empleo sino como motores de la economía frente a los azotes de la COVID-19
- El coronavirus destruyó 83.400 empleos en Andalucía, de los que un 27,57 % corresponden a la provincia de Granada
Granada, 28 de enero de 2021
CSIF Granada lamenta los datos ofrecidos hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondientes al cuarto trimestre de 2020 en la Encuesta de Población Activa (EPA) ya que “si bien reflejan una leve disminución en el número de personas desempleadas con respecto al tercer trimestre del año en 1.500 personas menos, cerramos el año 2020 con un total de 106.600 personas sin empleo en nuestra provincia, un total de 22.800 más que a cierre de 2019 y que nos retrocede a niveles de paro del segundo trimestre de 2017 cuando la provincia alcanzó los 109.000 parados”, denuncia la presidenta de CSIF Granada, Victoria Eugenia Pineda.
Estos datos “son preocupantes y reflejan la situación actual de nuestra sociedad y de nuestra economía al situarnos entre las cinco provincias con mayor tasa de paro de todo el país, en concreto del 24,84 %, cinco puntos por encima de la tasa de paro que teníamos hace justo un año, y solo superada por las provincias de Huelva, Las Palmas, Ceuta y Cádiz”. Además, añade la presidenta provincial, “cuatro de estas provincias son andaluzas, por lo que lamentablemente tanto Granada como Andalucía comienzan el año encabezando el ranking de las tasas de paro más altas del país, ambas por encima de la media nacional”.
Entre los principales aspectos, CSIF Granada considera “alarmante” que la temporalidad siga aumentando tanto en la Empresa Privada como en la Administración Pública, “en la que hemos alcanzado un porcentaje del 29,9 %, de casi diez puntos superior al del sector privado” y esto “lógicamente repercute en la calidad y continuidad de los servicios públicos que se prestan a la ciudadanía, sobre todo en sectores tan básicos como el Servicio Estatal de Empleo, la Seguridad Social, educación o sanidad donde se ha afrontado la pandemia con refuerzos y contrataciones temporales”.
Por último, Pineda reclama atajar la temporalidad y precariedad que sufre el sector de la empresa privada, males estructurales acrecentados por la pandemia, a la par que un plan de recursos humanos en la Administración que garantice la sostenibilidad de los servicios públicos, con un plan de choque sobre las plantillas capaz de hacer frente a la falta de efectivos, a la temporalidad y a la avalancha de jubilaciones que se van a producir, y que dé respuesta de una vez por todas a la agilización en el baremo de las bolsas de contratación y de las ofertas de empleo público y de estabilización pendientes.