La Junta presenta las novedades y ayudas dirigidas a la recuperación del pequeño comercio y la artesanía profesional
- La directora general de Comercio y la delegada territorial anuncian la inminente convocatoria de 2,5 millones de euros en ayudas para el impulsar las alianzas entre los empresarios del sector
La directora general de Comercio de la Consejería de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades, Lorena Garrido, ha destacado la apuesta de la Junta de Andalucía por los Centros Comerciales Abiertos (CCA) “como revulsivo para ayudar a la recuperación del pequeño comercio y la artesanía, actividades muy castigadas por las medidas de prevención y contención de la pandemia”. Así lo ha asegurado durante la ronda de visitas que realiza estos días junto a la delegada territorial, Virginia Fernández, a los tres CCA de la provincia de Granada: en la capital, Loja y Huétor Tájar.
Garrido ha hecho hincapié en la necesidad de seguir impulsando esta modalidad comercial, dado el complicado escenario al que la pandemia le ha hecho enfrentarse, “situación agravada por la fuerte contracción de la demanda, que pone en riesgo la supervivencia de muchos de estos pequeños y medianos comercios”. Por su parte, la delegada Virginia Fernández ha apuntado que “la situación de estos negocios se complica aún más verano si se encuentran en zonas que no son receptoras de veraneantes o turistas por lo que caen sus ventas y necesitan aún más nuestro apoyo”. Por ello, la Consejería de Transformación Económica trabaja para atender de la forma más eficiente las necesidades y circunstancias de estas pequeñas empresas.
La directora general ha hecho alusión al esfuerzo económico que está llevando a cabo su departamento en el ámbito del pequeño comercio y la artesanía, con un importante volumen de incentivos. Entre ellos, ha anunciado la convocatoria en las próximas semanas de una línea de ayudas de 2,5 millones de euros destinada a promover el asociacionismo y las relaciones de cooperación entre las empresas del pequeño comercio y la artesanía como salida para mejorar su competitividad.
El programa de 2,5 millones tiene como objetivo impulsar la actividad de las asociaciones de comerciantes y artesanos, fortaleciendo este tipo de organizaciones a fin de aumentar la competitividad de las pymes que las integran frente a otros formatos comerciales, otorgándoles los recursos necesarios para hacer de la experiencia del consumidor su buque insignia. Apoyará las actuaciones de promoción llevadas a cabo por ellas en ámbitos locales, a través de un centro comercial abierto, en las zonas comerciales de pueblos y ciudades que no cuenten con esa figura, en los mercados municipales de abastos o en los mercadillos de comercio ambulante.
De acuerdo con la nueva orden reguladora, estos incentivos sufragarán tres líneas de actuación. La primera está dirigida a promover el asociacionismo entre las empresas comerciales y artesanas con carácter general y la segunda se centrará en acciones de dinamización del comercio tanto en espacios comerciales abiertos como en mercados ambulantes y mercados de abasto. Por su parte, la tercera se destina a iniciativas de fomento en el ámbito de la artesanía.
Mediante estas líneas, se sufragará la organización de ferias, jornadas, congresos y seminarios, así como de talleres y acciones formativas dirigidas a la cualificación del personal de las empresas asociadas o de las propias asociaciones. También la realización de campañas de sensibilización e información, de dinamización y promoción del comercio y la artesanía, así como de incentivación del consumo y fidelización de la clientela. En el marco de esta orden, igualmente, se cubrirán otras acciones como la modernización digital de las asociaciones y el diseño o actualización de la imagen y manual de identidad.
De igual modo, se financiarán proyectos de mejora del espacio comercial común y actuaciones de señalización comercial externa. En el caso de las subvenciones dirigidas a la artesanía, también se dará cobertura a la adquisición de los elementos de la marca ‘Artesanía hecha en Andalucía’ para su utilización en los eventos de promoción. Podrán optar a estas ayudas las asociaciones de comerciantes, las entidades promotoras de centros comerciales abiertos, asociaciones de artesanos, federaciones y confederaciones de comerciantes y artesanos.
La cuantía máxima a subvencionar por entidad será de 40.000 euros, cifra que se reducirá hasta los 25.000 euros para las asociaciones de ámbito local de municipios menores de 20.000 habitantes. Se subvencionará un porcentaje máximo del 75% del coste de las acciones. El 50% de los incentivos se abonará mediante pago anticipado, abonándose el importe restante una vez que se acrediten y justifiquen las acciones objeto de financiación. En el caso de ayudas inferiores o iguales a 6.000 euros, se anticipará el 100% de la cantidad concedida.
En lo que respecta a la regulación de los CCA, la normativa recién aprobada deroga una orden vigente desde 2010 e incorpora las diversas modificaciones legales producidas en ese periodo y que inciden en la administración electrónica y la simplificación de procedimientos. La nueva orden pretende reforzar la figura de los CCA en una coyuntura marcada por la pérdida de identidad y competitividad comercial de los centros urbanos debido a la gentrificación turística y el aumento cada vez mayor de locales inactivos en estos enclaves. También trata de consolidar dicha figura ante la proliferación de nuevos formatos comerciales y hábitos de consumo, derivadas de la incorporación de las nuevas tecnologías de la información y comunicación.
En Andalucía cuentan con esta declaración 38 CCA, tres de ellos están ubicados en la provincia de Granada. El CCA de Granada capital aglutina en la actualidad a 233 asociados, el de Loja a unos 280 y el de Huétor Tájar, a otros 290. Esta clasificación hace alusión a aquella fórmula de organización comercial de todos los agentes económicos que estén implicados en un área urbana delimitada. Las novedades introducidas por la Consejería de Transformación Económica permiten fomentar la colaboración público-privada en la gestión del espacio urbano que da soporte a estos centros, exigiendo la cooperación con los ayuntamientos mediante algún instrumento jurídico reconocido. En este contexto, la Junta establece la condición de que la delimitación del centro disponga del visto bueno municipal.
Igualmente, se mejora la definición de esta herramienta, exigiéndose por primera vez una gestión profesional, que deberá ejercerla una figura independiente del órgano directivo para lograr mayor independencia y transparencia. En cuanto a los requisitos se introduce la obligación de que los nuevos proyectos de CCA cuenten con al menos 50 entidades asociadas y con una representatividad de al menos el 30% de los establecimientos del área delimitada.
Lorena Garrido y Virginia Fernández también han visitado la Zona de Interés Artesanal (ZIA) de Granada capital. Estas figuras reconocen la gran concentración de estos oficios y su calidad. La ZIA de Granada está integrado por una docena de talleres artesanos, entre los que se encuentran el del conocido guitarrero Gil de Avalle, José Óscar de Beas, especialista en taracea o Ramona Alonso, artesana y secretaria de la Federación de Artistas y Artesanos de Granada que ha recibido la placa de ‘Artesanía hecha en Andalucía’. También han conocido el trabajo del ceramista de Huétor Tájar, José Carlos Toro Fuentes, autor de ‘Retorno y Memoria’, su primera instalación artística para el Centro de Interpretación Torre Alquería de Huétor Tájar.