Moriscos y castellanos unidos en el Parapandafolk
La Musgaña ha sido el nombre clave en la reconstrucción del folclore castellano, convirtiendo esos repertorios tradicionales en un producto actual y atractivo como sus homólogos de otras latitudes que sí se ‘pusieron al día’. En su momento pasaron ya por el Parapanda, cuando formaban parte del grupo los que ahora son los ubicuos Fetén Fetén, pero reducidos a trío han añadido para esta ocasión a su potencia instrumental la voz purísima de Vanesa Muela, que así mismo también estuvo en Íllora con sus Hexacorde. El concierto que noche dejaron en el Parapandafolk se llama 3×4 y en él este tándem acude a las raíces con la sonoridad ampliada que caracteriza a la Musgaña. El encanto y la gestualidad de la cantante madrileña completa la musicalidad del trío, donde destaca el virtuosismo en flauta y tamboril de Luis Pedraza sobre encaje de muchos años del tándem Carlos Beceiro-Jaime Muñoz. Vanesa Muela dejó al público sorprendido con una canción ‘de panaderas’ cantada sobre la percusión de manos en una mesa. Muy aplaudidos por horario no pudieron conceder todos los bises que pedía insistentemente el público.
La Banda Morisca recogió el espíritu y dos miembros de Radio Tarifa, oteando los ecos de las culturas que resuenan a ambos lados del Estrecho y que en algún momento fueron la misma: Vincent Molino, Whafir Gibril. Con músicos de otros grupos como La Jambre han dado forma a esta grupo cuyo referente instantáneo fue la banda del malogrado Benjamín Escoriza. Recuperan una actualizada forma de ver las músicas de las orillas con la energía que requiere el oído actual y desarrollos instrumentales calificables por momentos…. hasta de progresivos. Su repertorio estuvo formado por rumbas, romances, moaxajas, arboreás, tangos y guajiras, imaginadas éstas en la procedencia caribeña de la población negra que hubo en tiempos en Sevilla. Una actuación muy intensa y que conecto instantáneamente con la audiencia, que llenó el auditorio Morente (en proporciones Covid) y fue ovacionada, con el público de pie a su final.
Cadavieco y Luar na Lubre
No son muchos los que aún tocan el rabel, un instrumento medieval cuyo origen se pierde en la historia. El cántabro Miguel Cadavieco es uno de sus más notables intérpretes, en ocasiones ejerciendo de juglar, improvisando pícara o humorísticamente sobre noticias y ‘referidos’ del lugar. Cadavieco ha sido un elemento imprescindible en el resurgir de la música tradicional en Cantabria. Destaca su amplio repertorio que abarca romances, tonadas, bailes a lo pesau y a lo ligeru y su capacidad para la improvisación. Sucesor del maestro Chema Puente actualmente Miguel imparte clases del instrumento en la escuela de Música Tradicional de Colindres. Ha recorrido con su instrumento la geografía española y ha participado en diversos encuentros de improvisadores en la Península y en el extranjero. Ha colaborado en los siguientes músicos: Vanesa Muela en Generación espontánea, con Julián Revuelta en Así canta el malvis de tanos, Gala del folclore Cántabro en dos ocasiones, Rabelistas en olea grabado en directo en el albergue de Olea y con los grupos Camberal cierzu A dçonde se fue Basilio y Saltabardales Echar el Campanu entre otros muchos otros nombres del panorama de las músicas tradicionales.
Luar na Lubre es sin duda a día de hoy una de las bandas de referencia dentro del folk gallego, y es que, desde que Mike Oldfield en 1996 decidiera incluir una versión de su tema más popular O Son do Ar en su disco Voyager, esta formación no ha parado de crecer y evolucionar musical y artísticamente hasta llegar a convertirse en uno de los grupos de música celta de referencia en nuestro país. Luar na Lubre ha vendido más de 300.000 copias de su discografía. Trabajan sobre todo con la tradición musical de su Galicia natal. Por ello, centran su trabajo, principalmente, en el estudio de los temas tradicionales del cancionero gallego.
Luar significa en gallego resplandor de la luna; lubre era el bosque mágico en el que los druidas celtas realizaban sus hechizos.
A lo largo de su carrera como formación musical ha difundido y valorado la cultura y música gallega, llevándola a lugares recónditos del mundo. Su último disco, Vieiras y vieiros, se centra en las tradiciones y leyendas del Camino de Santiago.