Descubierta una plantación de marihuana en un cortijo de la Alpujarra
La operación Bogda de la Guardia Civil ha derivado en la investigación de un joven polaco de 26 años, sin antecedentes policiales, por un presunto delito contra la salud pública por cultivo de droga al descubrir que poseía supuestamente una plantación de marihuana en un cortijo de Órgiva.
La Guardia Civil de esta última localidad, según ha informado el instituto armado en una nota de prensa, averiguó que unos jóvenes de países de Europa del Este «habían alquilado un cortijo en el municipio de Órgiva con la intención de cultivar marihuana».
Los investigadores recorrieron distintos cortijos del término municipal y, tras entrevistarse con sus propietarios, consiguieron averiguar cuál era el cortijo donde habían comenzado a residir estos jóvenes.
Una vez localizado, los agentes realizaron una vigilancia discreta del cortijo y comprobaron que por los alrededores y en el tejado de la vivienda, ocultas a la vista entre las altas ramas de un olivo, había un total de 14 macetas con plantas de cannabis sativa en avanzado estado de floración, según los datos facilitados por la Guardia Civil.
Fruto de esta vigilancia, la Guardia Civil comprobó además que el responsable de las plantas era el joven investigado. Este, al ser interrogado, reconoció a los agentes que las plantas eran suyas.
Detenido un joven acusado de robar en un chiringuito de Castell
El instituto armado ha detenido a un joven de 18 años, con antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de robo con fuerza en un chiringuito de playa de Castell de Ferro.
Durante la madrugada del pasado 29 de julio, el joven detenido habría accedido al establecimiento por el tejado, donde hizo supuestamente un boquete para colarse dentro, según los datos facilitados por la Guardia Civil en una nota de prensa. Se habría apoderado de botellas de licor y otros efectos valorados en unos 750 euros, y huyó con ellos después de romper la puerta del chiringuito desde dentro.
El instituto armado abrió una investigación y los agentes encargados se entrevistaron con un grupo de jóvenes que suelen reunirse hasta altas horas de la noche por las inmediaciones. Así averiguaron que en la casa de uno de ellos habían acogido a un joven sin domicilio conocido durante varias noches y que había dejado allí varias botellas de licor antes de irse.
Los investigadores recuperaron las botellas de la casa del testigo, comprobaron que eran las mismas que habían robado en el chiringuito y se las devolvieron a su propietario. Una vez identificado el presunto autor de robo, un joven al que la Guardia Civil de Castell de Ferro ya había detenido antes por otros delitos similares, procedía buscarlo y los agentes lo localizaron y detuvieron en una vivienda en construcción de esa localidad donde había buscado refugio.
