Espadas expresa su respaldo a una ILP apoyada por once ayuntamientos para impulsar una Ley andaluza de Cultura

El alcalde de Sevilla y secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, ha expresado este lunes públicamente el respaldo de su partido a una iniciativa legislativa popular (ILP) registrada en el Parlamento autonómico para la aprobación de una Ley Andaluza de Cultura, que cuenta con el respaldo de once plenos municipales de todas las provincias de la comunidad y de municipios de distinto tamaño con una representación total de más de 640.000 electores.

El alcalde de Sevilla, junto con representantes de otros diez ayuntamientos andaluces –Conil (Cádiz), Andújar, Arjona (Jaén), Genalguacil (Málaga), Peligros (Granada), Dalías, Carboneras (Almería), Cortegana (Huelva), Montilla (Córdoba) y Ayamonte (Huelva)- y el presidente de la asociación andaluza de profesionales de la gestión cultural (GECA), Rafael Morales, han registrado este lunes en el Parlamento andaluz dicha iniciativa legislativa promovida para que Andalucía sea la segunda comunidad autónoma española en desarrollar una Ley de la Cultura.

Este marco normativo, que nace del propio sector, busca «dar estabilidad jurídica, promover la profesionalización, garantizar la accesibilidad y la igualdad de oportunidades y fomentar una adecuada dotación presupuestaria de las administraciones públicas».

Espadas ha defendido que esta iniciativa es «un ejemplo de real de innovación política y social, y de utilidad social de la cultura», así como ha subrayado que hay «mucho trabajo detrás» de esta ILP.

Ha resaltado que «los ayuntamientos estamos escuchando al sector y promoviendo una normativa necesaria que han elaborado los propios profesionales. La cultura es nuestra seña de identidad y es un pilar básico dentro del proceso de recuperación económica y social. Esta ley es un paso más que nace del trabajo consensuado y del diálogo, y somos los municipios quienes damos respaldo y voz al sector al registrarla para que sea tramitada en el Parlamento».

Espadas ha puesto de relieve que la realidad del sector de la cultura «se vio agravada» durante la pandemia de Covid-19, cuando se pudo «comprobar de primera mano hasta qué punto su situación laboral, sus expectativas, tienen un marco de inseguridad jurídica que los deja al albur de la iniciativa» o la «voluntad política de la administración de turno para poder seguir adelante con su trabajo, poder desarrollar su capacidad y su producción creativa y ser capaz, además, de asegurar condiciones laborales dignas, justas, para los trabajadores de ese sector».

Espadas ha defendido que «se necesita que esta iniciativa legislativa popular se escuche» en el Parlamento de Andalucía, así como que la actividad de la cultura es «absolutamente fundamental para la economía» de la región, y «esta sociedad civil organizada y este sector de actividad productiva necesitan ser escuchados».

El alcalde hispalense y líder de los socialistas andaluces ha explicado que esta ILP nació en noviembre de 2020, en plena pandemia, durante el congreso andaluz de la cultura y la gestión cultural organizado por la GECA con la colaboración del Ayuntamiento de Sevilla y de la Consejería de Cultura. El sector acordó allí promover una ley propia de la cultura en Andalucía cuya redacción fue realizada por una amplia representación de asociaciones y entidades con el asesoramiento de expertos de primer nivel. El modelo ha sido la ley de cultura de Navarra, única comunidad autónoma que ha desarrollado este marco legislativo.

Espadas ha señalado que los ayuntamientos pueden «plantear nuevas iniciativas», pero éstas «se nos quedan pequeñas porque no tenemos instrumentos o normativas competenciales para poder desarrollar el marco de seguridad jurídica que ello requiere», y por eso se ha decidido «impulsar una nueva norma para Andalucía, una ley de la cultura», que «es tanto como hablar del progreso», según ha remachado.

Cultura

En esa línea, el dirigente del PSOE-A ha defendido que «apoyar hoy una ley para la cultura, para el sector cultural en Andalucía, seguramente sea apoyar el progreso, la economía de Andalucía en los próximos años, los derechos de todos los trabajadores que están en ese sector y, también, seguramente el futuro».

Espadas ha querido dejar claro que el PSOE-A «se va a convertir en el grupo parlamentario que apoye esta iniciativa legislativa popular, que la respalde, que la ayude» desde los ayuntamientos, y al respecto ha lanzado un mensaje invitando a ampliar el apoyo a esta propuesta desde los plenos municipales, porque «estamos hablando de derechos, de condiciones laborales, de cómo favorecer la actividad creativa, la producción y la gestión del patrimonio cultural», según ha incidido.

Para promover esta iniciativa se ha acordado emplear el cauce que establece la ley a través de los municipios, y con ella se pretende que la cultura cuente con «un marco jurídico estable que además permita mejorar todos los procedimientos administrativos».

Se buscan además «garantías de acceso, participación y contribución de todas las personas en la vida cultural; respeto a la libertad de expresión, creación artística y la identidad cultural y garantías para conseguir la dignidad en el trabajo cultural y el desarrollo profesional».

La norma plantea además un marco legal para la protección y puesta en valor del patrimonio cultural material e inmaterial, la accesibilidad universal, y la adecuada dotación presupuestaria de las administraciones públicas para el desarrollo de derechos y deberes.

Derechos básicos

La iniciativa legislativa regula así una serie de derechos básicos culturales de Andalucía, como el derecho a «elegir libremente la propia identidad cultural o el derecho a la diversidad cultural»; a «la libertad de opinión y de expresión en el idioma de su propia elección»; a «acceder libre y equitativamente a la cultura, los bienes y servicios culturales prestados por las Administraciones Públicas de Andalucía», así como a «la producción y creación literaria, artística, científica y técnica; el derecho a desarrollo de la capacidad creativa y a difundir y distribuir los resultados de su ejercicio».

También regula los derechos a «participar en la vida cultural a través de las propias creaciones y prácticas de libre elección en condiciones de equidad, diversidad y singularidad», y a «participar libremente de manera activa e informada en los procesos relevantes de toma de decisiones en materia de programas y políticas públicas culturales en las que la ciudadanía sea interesada».

Otros derechos regulados son los de «acceso libre y equitativo al patrimonio cultural material e inmaterial de Andalucía, sea cual sea su titularidad y a disfrutar del mismo, así como a colaborar desde el interior de su comunidad en la recuperación, estudio, protección, conservación, difusión, puesta en valor y promoción».

De igual modo, con la ILP se quieren impulsar los derechos a «acceder de manera informada en condiciones de igualdad a la producción de conocimiento de las diferentes culturas tradicionales y populares que configuran el acervo histórico y presente de Andalucía»; a «la recuperación de la memoria cultural e histórica», y «a la producción de información, protección y disfrute de los derechos irrenunciables derivados de las creaciones literarias, artísticas y científicas de su autoría de acuerdo con la normativa vigente en materia de propiedad intelectual».

Una vez registrada esta ley por parte de ayuntamientos andaluces, siguiendo el cauce establecido en la ley autonómica, el Parlamento andaluz debe iniciar su tramitación. El objetivo es que «pueda ser aprobada lo antes posible y que forme parte del proceso de recuperación del sector ante las consecuencias de la crisis sanitaria».