La Policía Local continuará actuando en terrazas que incumplan la normativa en zonas afectadas por ruidos
- Estos controles y retiradas de mobiliario de terrazas se producen en un momento en que vecinos de estas zonas se han organizado en una plataforma contra los ruidos y los botellones
La Policía Local de Granada seguirá actuando en zonas de la ciudad para que se cumpla la normativa en materia de ocupación de la vía pública con las terrazas de los establecimientos hosteleros y poder así conciliar su actividad con el derecho al descanso de los vecinos, después de que, este pasado miércoles en la tarde, retirara en las calles Moras y Almona del Capillo, en el entorno de Ángel Ganivet, en el centro, un total de 34 mesas, 93 sillas, cinco separadores y cuatro maceteros.
Así lo ha detallado la Policía Local en su perfil de la red social Twitter y lo ha confirmado, en declaraciones a los medios este jueves, la edil de Protección Ciudadana y Movilidad, Raquel Ruz, que ha hecho hincapié en que el seguimiento para que «la norma se cumpla» va a ser «continuo» en las zonas en que hay problemas con los ruidos para los vecinos.
El Ayuntamiento había advertido los establecimientos en que se intervino hace una semana de que no tenían permitidas las mesas altas, de acuerdo a lo que marcan las ordenanzas. Raquel Ruz ha explicado que le dieron entonces «24 horas» para que las retiraran y la Policía Local, a la que ha felicitado, actuaba finalmente este pasado miércoles en los pubs y bares que no se habían adaptado a los requerimientos o lo habían hecho parcialmente.
Asimismo, Ruz ha explicado que, en la mañana de este jueves, ha mantenido una reunión con empresarios de esta zona de Ganivet para alcanzar «soluciones de futuro» sobre ideas que se trasladarán a la comisión municipal de terrazas, y entre las que ha citado la limitación de espacios, una mayor vigilancia, y control exhaustivo de aforo. Se ha propuesto también una comisión mixta con vecinos.
Están «dispuestos a seguir proponiendo» fórmulas para «mejorar las condiciones de sus locales» y poder seguir incrementando su actividad económica ahora que la situación sanitaria por la pandemia del coronavirus mejora, pero respetando un «espacio de descanso» y «tranquilidad» a los que «tienen derecho».
Estos controles y retiradas de mobiliario de terrazas se producen en un momento en que vecinos de estas zonas se han organizado en una plataforma contra los ruidos y los botellones, con la que están promoviendo en los últimos días protestas con sábanas blancas en las ventanas y caceroladas.