Salud distingue a 20 nuevas Zonas Cardioaseguradas en la provincia de Granada
La Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía ha concedido la distinción de ‘zona cardioasegurada’ a 20 nuevos espacios en la provincia de Granada distribuidos entre Ogíjares, Alhama de Granada, Armilla, Motril, Churriana de la Vega, Atarfe y Granada capital, los cuales sido reconocidos por la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias como zonas que cumplen los requisitos necesarios para intervenir en los primeros minutos ante una situación de parada cardiaca.
El delegado provincial de Salud y Familias, Indalecio Sánchez-Montesinos García, acompañado del director de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias 061 de Granada, Eladio Gil, ha hecho entrega de los certificados de zonas cardioaseguradas a los representantes de estas instituciones que han organizado a sus profesionales para que puedan actuar ante una parada cardiaca, tras recibir la formación en técnicas de reanimación cardiopulmonar y uso del desfibrilador por parte del 061.
La Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, encargada de la gestión y registro de estos distintivos, reconoce así a un total de 109 zonas cardioaseguradas en la provincia de Granada, sumando estos 20 nuevos espacios a otros 89 repartidos entre instituciones de Granada y provincia.
En todos ellos los profesionales están capacitados para actuar de forma inmediata en caso de presenciar una parada cardiorrespiratoria, sumando sinergias a la posterior asistencia por parte de los equipos de emergencias sanitarias, con los objetivos de disminuir la mortalidad y secuelas a través de una excelente actuación inicial.
Durante el acto, el delgado de Salud y Familias de Granada ha destacado la importancia de formar en reanimación cardiopulmonar al mayor número de jóvenes posibles, llegando a alcanzar la provincia de Granada unas 8.000 personas entrenadas en estas técnicas por el 061 desde el año 2013.
La correcta atención a la parada cardiorrespiratoria consiste en la aplicación precoz de una serie de acciones conocidas como cadena de supervivencia que incluye, por este orden, el reconocimiento de la situación y activación del sistema de emergencias sanitarias, el inicio inmediato de las maniobras de soporte vital básico, la desfibrilación eléctrica precoz y la rápida instauración de las técnicas de soporte vital avanzado.