Igualdad critica que el juez no deje libre a Juana Rivas tras su indulto parcial: «Es violencia institucional»
La secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género, Ángela Rodríguez ‘Pam’, ha criticado este viernes que el Juzgado de lo Penal número 1 de Granada haya rechazado suspender la ejecución de la pena impuesta a Juana Rivas, condenada a prisión por la sustracción de sus dos hijos menores en el verano de 2017, tal y como la madre de Maracena solicitó tras el indulto parcial que le concedió el Gobierno.
En un mensaje en la red social Twitter, recogido por Europa Press, ‘Pam’ ha lamentado que la decisión se tome coincidiendo con el Día de los Derechos Humanos. «Es más grave aún que un juez haya evitado que Juana Rivas sea puesta en libertad, en contra del indulto y la fiscalía, a pesar de todas sus denuncias por la violencia que ella y sus hijos han sufrido», ha escrito la secretaria de Estado.
Además, ha tildado el rechazo a la libertad de Juana Rivas de «violencia institucional». «Estamos contigo, Juana», ha recalcado en la publicación que ha compartido con un ‘retuit’ la ministra de Igualdad, Irene Montero.
Por su parte, la delegada del Gobierno para la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha asegurado que no se puede «imponer la ideología misógina» a la ley. «No hay derecho. El Gobierno resolvió su indulto parcial; el Tribunal de Cagliari resolvió que Juana no es un peligro, y que los niños vinieran en Navidad; ni Fiscalía ni Arcuri se oponen a la suspensión de lo que resta de pena», ha reiterado también en redes sociales.
El juez Manuel Piñar alega, en un auto fechado este pasado jueves 9 de diciembre, al que ha tenido acceso Europa Press, que Rivas, cuya pena tras el indulto ha quedado reducida a un año y tres meses de prisión, «no ha mostrado arrepentimiento».
«En varias ocasiones ha manifestado que no se arrepiente y lo volvería a hacer», mantiene el juez, que incide también en «el peligro que para los menores supondría la plena libertad de la madre», apuntando a supuestos «indicios de abusos sexuales a uno de los menores cuando estaban bajo su custodia».
Para el magistrado, «la ausencia de arrepentimiento y la posterior repetición de la misma conducta indica una predisposición a cometer nuevamente el mismo delito».