Con una brecha salarial del 15%, las granadinas tendrían que trabajar 55 días más que los hombres para ganar lo mismo
- Delegados y Delegadas de CCOO y UGT se han concentrado hoy frente a la sede sindical de Granada, para denunciar que, según el Estudio Mercado de Trabajo y Pensiones de la Agencia Tributaria para el año 2020, las granadinas cobraron de media 15.156€, mientras que en el caso de los hombres, esta cifra asciende a 17.850€, lo que supone una brecha salarial del 15,09% (2.596€ menos al año) es decir que para percibir el mismo salario las mujeres granadinas tienen que trabajar 55 días naturales más. El sector donde más brecha salarial hay en Granada es el de la industria seguido de la agricultura (ambas con 36,46%). de las 165.920 asalariadas en Granada, más de la mitad (58,80%) en concreto 97.566 mujeres, perciben un salario igual o inferior al SMI. Además, la pensión media anual de una mujer en la provincia de Granada en el año 2020 ha sido un 22,04% menor que la pensión de un hombre (3.571€ menos al año), y en prestaciones por desempleo, la diferencia entre lo que cobran los desempleados granadinos respecto a las desempleadas granadinas asciende al 6,68%.
Ante estos datos, la responsable de Igualdad de UGT Granada, Elisenda Sánchez, celebra que la brecha salarial en nuestra provincia haya descendido, respecto al año anterior, y espera que para los próximos años, el incremento del salario mínimo y de de la reforma laboral sirvan para reducir aún más esta brecha. La prevalencia del convenio del sector por encima del de empresa, la desaparición de las empresas multiservicios que desregulan las condiciones de trabajo y el impulso del empleo indefinido tendrán una gran repercusión en el aumento de los salarios de las mujeres, que pueden ver incrementados sus sueldos hasta el doble en algunos casos, ha destacado la ugetista.
Para la representante de UGT, todos los cambios legislativos que se han puesto en marcha deben impulsar los registros salariales y la valoración de los puestos de trabajo que hay que abordar en todos los convenios. La guía de valoración de puestos de trabajo ya está acordada, apunta, y tiene que impulsarse en pocas semanas, y la guía de auditorías salariales se está completando y saldrá a la luz en los próximos meses.
En este sentido, ha reclamado a las empresas que cumplan con la ley, registrando planes de igualdad., con medidas que se tienen que cumplir. Es imprescindible dotar de los recursos necesarios para el desarrollo de las medidas de igualdad. Si el trabajo de las mujeres se valora igual que el de los hombres será bueno para el impulso de la economía y el empleo, ha concluido.
Por su parte, Clara Castarnado, Secretaria de Acción Sindical y Mujer de CCOO de Granada ha explicado que la parte principal de la desigualdad salarial entre mujeres y hombres se explica por la diferente distribución laboral y composición del empleo: las mujeres soportan una inserción laboral en peores condiciones y en sectores y ocupaciones generalmente peor pagadas, lo que se traduce en un salario medio menor. “Las mujeres sufren la desigualdad laboral, primero, en el acceso al trabajo, con peores contratos, más jornadas parciales, en ocupaciones y sectores claramente feminizados; segundo, en la promoción y la trayectoria laboral (“techos de cristal”, “paredes de cristal”, “suelos pegajosos”) influidas por carreras laborales más cortas al estar sometidas a mayores interrupciones y un menor “presentismo”; y finalmente, soportando todavía en algunos casos discriminación salarial directa en el puesto de trabajo”, asegura la responsable sindical.
Castarnado (CCOO) denuncia los sesgos de género que aún afectan a las mujeres, empezando por la parcialidad como “fórmula de contratación” para las mujeres o la incidencia de la maternidad en el desarrollo de sus carreras profesionales, ambos factores muy presentes en la brecha salarial. No obstante, señala que la aplicación de la reforma laboral contribuirá a cerrar las brechas, al atacar la precariedad en los sectores con peores condiciones, que son los más feminizados. “La vuelta a la prevalencia del convenio del sector sobre el de empresa, la aplicación de las condiciones salariales del convenio de la actividad que se presta por las subcontratas y la recuperación de la ultraactividad mejorarán el salario de las actividades de subcontratación feminizadas”. Asimismo, ha destacado los planes de igualdad como “herramienta fundamental para hacer frente a la brecha salarial”.