La juventud granadina vuelve con justicia climática

La crisis del coronavirus ha demostrado que un país unido es más fuerte, pero esta no es
la única causa común a la que nos enfrentamos. La juventud vuelve a actuar para recordar
que la siguiente crisis está a la vuelta de la esquina: la climática. Ahora es el momento de
actuar. Bajo el lema “Volvamos con justicia climática”, toman las calles en un sentido
metafórico y respetuoso con las medidas del COVID.
Hoy, cuando toda la población sufre en carne propia las consecuencias directas e indirectas
de la pandemia del coronavirus, se hace patente lo urgente e ineludible que es aunar
esfuerzos. La solidaridad es fundamental para hacer frente a la enfermedad y sus
repercusiones sanitarias y sociales. Unas consecuencias que son sufridas en mayor grado
por las personas y los colectivos más vulnerables, que padecen no solo la crisis sanitaria sino
la precarización y el empeoramiento de sus ya poco dignas condiciones de vida.
La ciudad despertará decorada por efímeras frases que sin embargo esperamos
permanezcan en la mente de los ciudadanos. Lugares emblemáticos tales como la Avda. de
la Constitución, la Fuente de los leones, Bib Rambla y muchos otros gritan en silencio
mensajes de justicia climática, “necesitamos un cambio sostenible” (Recogidas), “Apoya el
consumo local” (frente al Burguer King) o un “SOS” por la Tierra.
A pesar de haber seguido y respetado los protocolos de seguridad, tres personas de FFF han
sido retenidas e identificadas. Seguimos pensando que no es momento de interferir en la
lucha contra la pandemia ni de detraer recursos de ella y, por eso, hemos propuesto
actividades respetuosas tanto desde las redes sociales como con dibujos hechos con tizas.
Esta crisis de salud pública ha puesto de manifiesto que la sensación que teníamos de
seguridad absoluta garantizada por la tecnología no era más que eso: una sensación. La
realidad es que esta crisis nos ha pillado desprevenidos, cuando los planes de prevención y
emergencia son fundamentales para combatir las crisis futuras de forma efectiva. Si no se
traza un plan antes de que los efectos de la crisis climática sean dramáticos y evidentes, no
habrá tiempo para medidas. El momento de actuar es ahora. Tenemos que escuchar a la
ciencia y evitar las catástrofes que se nos vienen encima, que afectarán a la mayoría de los
ecosistemas y sociedades humanas del mundo.
La justicia climática es también justicia social. Tenemos la oportunidad de volver a la nueva
normalidad con un modelo de economía sostenible, que impulse el comercio de cercanías, el
transporte público y la recuperación de espacios para los peatones. Miremos al frente y
dejemos atrás medidas obsoletas y dañinas para el medioambiente como las del decretazo.