CCOO consigue mayoría de representantes en las elecciones sindicales celebradas en 2019

• Comisiones Obreras, con 643 representantes, se ha convertido en el primer sindicato en la provincia en el año 2019, gracias a la confianza depositada por las trabajadoras y trabajadores en las cerca de 500 empresas donde se han celebrado elecciones sindicales durante el pasado año.

Comisiones Obreras ha ganado las elecciones sindicales en el año 2019 con una diferencia de 88 representantes con respecto al segundo sindicato. Esto el así, según el sindicato, por la gran labor que desarrolla Comisiones Obreras en las empresas, que » le ha permitido tener el mismo número de representantes que el resto de las 42 organizaciones sindicales juntas, a excepción de UGT, que participan en algún proceso electoral».

Según el sindicato, estos datos ponen de manifiesto que la clase trabajadora deposita su confianza mayoritaria, en primer lugar, en Comisiones Obreras y subsidiariamente en el sindicalismo de clase, representado por CCOO y UGT, ambas con un total de 1193 representantes en las empresas, siendo un 64 % del total de representantes elegidos durante el 2019.

La central sindical señala que la Ley Orgánica de Libertad Sindical garantiza los intereses de las trabajadoras y trabajadores al situar el porcentaje de representatividad necesario para la interlocución con las Administraciones en el 10%, evitando así que centrales sindicales que no cuentan con suficiente respaldo de las personas trabajadoras puedan atribuirse su interlocución, en aras del interés colectivo.

CCOO lamenta las declaraciones de la central sindical CSIF atacando y desprestigiando la Ley Orgánica de Libertad Sindical, ya que «denotan un claro desconocimiento de la normativa y un desprecio a los miles de trabajadores y trabajadoras que apoyan a otras fuerzas sindicales».

Para Comisiones Obreras la Ley Orgánica de Libertad Sindical es la mayor garante de fiscalidad y control para acreditar la representatividad de las organizaciones sindicales, que cuenten con el suficiente apoyo de la clase trabajadora y no de aquellas centrales sindicales que puedan defender otros intereses particulares que no son los de la clase trabajadora.