Cerrada la Catedral y el resto de monumentos eclesiales de Granada
La Archidiócesis de Granada suspende desde este miércoles las visitas turísticas de la Catedral y el resto de sus monumentos turísticos hasta nuevo aviso, con motivo del cierre perimetral del término municipal de la capital granadina para tratar de frenar la segunda ola de la pandemia de covid-19.
Además de la Catedral, los monumentos turísticos de la Archidiócesis son la Capilla Real, la Abadía del Sacromonte, y los monasterios de la Cartuja y de San Jerónimo.
Por otro lado, y según ha detallado el Arzobispado en una nota de prensa, la Catedral y la Capilla Real mantienen el culto. Igualmente, desde este miércoles la misa que diariamente se celebra en el templo catedralicio a las 9,00 horas se traslada a esa misma hora a la iglesia parroquial contigua del Sagrario.
Este traslado no afecta a las celebraciones de los domingos y festivos, que tendrán lugar en la Catedral a las 11,00 horas y a las 12,30 horas. En la primera ola de la pandemia, el Arzobispado de Granada suspendía las visitas culturales a la Catedral, la Capilla Real, el Monasterio de Cartuja o la Abadía del Sacromonte el pasado 13 de marzo, el día antes de que se activara el estado de alarma. Estos lugares turísticos de la Iglesia fueron reabiertos a las visitas el pasado 16 de junio, con la desescalada.
Asimismo, la Archidiócesis ha informado que el próximo 1 de noviembre, día de Todos los Santos, el conjunto catedralicio mantiene sus horarios de celebraciones litúrgicas en domingos y festivos. Así, ese día, en la Catedral, la misa será a las 11,00 horas y a las 12,30 horas, esta última presidida por el arzobispo de Granada, Javier Martínez. En la Capilla Real, la misa es a las 10,00 horas y en la iglesia parroquial del Sagrario es a las 13,30 y a las 19,00 horas.
El día de todos los difuntos, el 2 de noviembre, se mantiene el mismo horario que en la solemnidad de Todos los Santos en el caso de la Capilla Real y el Sagrario, mientras que en la Catedral la misa será a las 9,00 horas, presidida por el arzobispo.
Después, se podrá visitar la cripta en el templo catedralicio, siguiendo las medidas sanitarias establecidas de prevención del coronavirus. En ambas celebraciones se rezará especialmente, como cada día, por los fallecidos por covid-19 y los enfermos, así como los profesionales sanitarios y quienes luchan contra esta pandemia.
