Cuenca pide a la Junta explicaciones sobre los efectos de la antena del estadio de la Juventud en la salud de los vecinos

• El PSOE ha mantenido un encuentro con vecinos  de la calle Ramón y Cajal, que han expresado la opacidad tanto de Ayuntamiento como de Junta de Andalucía cada vez que intentan informarse sobre la tramitación jurídica de la citada antena

Desde hace un par de meses, los habitantes de los inmuebles de la calle Ramón y Cajal, esquina con Camino de Ronda, asisten con preocupación al levantamiento de una antena de grandes proporciones en la parcela que ocupa el Estadio de la Juventud, titularidad de la Junta de Andalucía. Hoy, el Grupo Municipal Socialista, encabezado por su portavoz, Paco Cuenca, ha mantenido un encuentro con ellos en esa zona para recoger sus demandas y atender a su solicitud.

Cuenca ha explicado que “resulta extraño que todo lo relacionado con la antena dentro del estadio se esté llevando con tanta opacidad”, y ha lamentado que el alcalde de Granada “no haya recibido aún a unos vecinos que le han pedido una cita para tratar este tema. Parece que la parálisis del gobierno local llega a esos extremos”.

El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento ha exigido “al gobierno autonómico, como titular de la parcela en la que se está levantando la antena, que explique a los vecinos del barrio de La Rosaleda los efectos que para su salud puede tener dicha instalación, sobre todo porque se encuentra muy cerca de las viviendas situadas en la calle Ramón y Cajal”. En ese sentido, Cuenca se ha comprometido con los representantes vecinales con los que se ha reunido que intentará que “se arroje luz, en especial desde el área de Urbanismo, a toda la tramitación que se ha ejecutado para que la antena se levante, pues al parecer no hay constancia ni de permisos ni de licencias. Haremos una solicitud de información al respecto e intentaremos que este asunto sea objeto específico de la primera comisión de Urbanismo que se convoque por el actual equipo”.

El edil socialista ha manifestado que “el Gobierno de la Vergüenza, no solo tiene a la ciudad paralizada por su debilidad, sino que parece que introduce a la gestión municipal en sus peores tiempos de oscuridad y de falta de información. Al parecer este nuevo Ayuntamiento y la nueva Junta de Andalucía se llevan bien y comparten una querencia hacia la opacidad que no compartimos en absoluto, pues la ciudadanía nos demanda total transparencia, mucho más en un Consistorio al que Sebastián Pérez, hoy concejal que controla de nuevo el Urbanismo de Granada, y su equipo, ya señalaron con la peor cara de la corrupción hace unos años”.