Desconfinar la información y vacunarla contra la mentira
- El SPA y la FeSP piden medidas frente a la precariedad laboral, atención a los problemas de salud mental de los periodistas por la COVID-19 y regular el derecho a la información de la ciudadanía
El 1 de mayo, Día Internacional del Trabajo, y el 3 de mayo, Día Mundial de la Libertad de Prensa, se conmemoran este año cuando toda la sociedad ha sufrido y continúa sufriendo los efectos de la COVID-19. El mundo del periodismo también ha padecido y padece las graves consecuencias del coronavirus. Los ERTE y ERE, los despidos, los recortes salariales, la pérdida de empleos y de encargos a los periodistas a la pieza han empeorado la calidad de la información y no han contribuido a que, en un momento tan sensible, la ciudadanía haya visto cumplido de manera satisfactoria su derecho constitucional a la información.
En la conmemoración de estos dos días internacionales, que son las dos caras de una misma moneda, el Sindicato de Periodistas de Andalucía (SPA) y la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) reclaman al Gobierno medidas urgentes para poner fin a la precariedad laboral en el sector periodístico, que en el último año se ha agravado todavía más y ha dejado a muchos compañeros y compañeras en una situación extremadamente preocupante.
La falta de una ley que regule el derecho a la información y la comunicación de la ciudadanía supone un agravio comparativo inadmisible en una sociedad democrática. Desde la recuperación de la democracia han sido regulados los derechos fundamentales de la ciudadanía (sanidad, educación, vivienda, atención social…) pero se ha excluido el derecho a la información, a pesar de que éste es imprescindible para que se cumplan los demás de manera plena.
El SPA y la FeSP insisten en la necesidad de regular por ley el trabajo de los y las periodistas a la pieza, que trabajan en condiciones laborales indecentes, en contra de lo que ocurre en otros países de Europa. El número de profesionales a la pieza y freelances no para de aumentar y su situación ya es, además de una injusticia histórica, una burla cínica de los legisladores hacia unas personas que no tienen ningún derecho social.
La pandemia de la COVID-19 ha traído nuevos desafíos para los y las periodistas: desaparición del equilibrio laboral por trabajar en exceso, pérdida del puesto de trabajo y de los encargos en muchos casos, confusión entre la vida profesional y la personal por el teletrabajo… Todo esto ha agravado la inseguridad de este sector y la calidad del trabajo que hacen los profesionales de la información para la ciudadanía, que se ve condicionado por esa situación. Hay que desconfinar la información y vacunarla contra las mentiras, cada día más abundantes y perjudiciales para la sociedad.
La Federación Internacional de Periodistas (FIP) -a la que pertenece el SPA y la FeSP- han alertado de los problemas de salud mental que sufren los periodistas dedicados a cubrir la información de la COVID-19, de los que no se suele hablar: estrés, ansiedad, depresión, trastornos en el sueño y en la alimentación, situaciones de tensión, agotamiento… Así lo han señalado la mayoría de los profesionales en encuestas realizadas por el Centro Internacional de Periodistas (ICFJ), Reuters y la FIP. El Gobierno y los dueños de los medios de comunicación deben adoptar medidas ante estos problemas.
En la conmemoración de este 1 y 3 de mayo el SPA y la FeSP también afirman que, para defender el derecho a la información de la ciudadanía, es necesario que en España se aprueben medidas de protección de los y las denunciantes o alertadores de casos de corrupción. No hacerlo supone un preocupante retroceso en la calidad de la democracia.
Una vez más, el SPA y la FeSP instan al Gobierno y a los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados a que promuevan una Ley Orgánica de Garantías del Derecho a la Información y la Comunicación de la Ciudadanía, para regular un derecho que está reconocido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en otras normas internacionales y en la Constitución Española.
En defensa de los derechos laborales y profesionales del periodismo y del derecho a la información de la ciudadanía, el Sindicato de Periodistas de Andalucía (SPA) y la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP) hacen un llamamiento a los profesionales de la información a participar en los actos y manifestaciones convocadas para conmemorar el Día Internacional del Trabajo y el Día Mundial de la Libertad de Prensa, respetando en todo momento las recomendaciones de las autoridades sanitarias frente a la COVID-19.
Junta Ejecutiva Federal de la Federación de Sindicatos de Periodistas (FeSP)