Detienen a un empresario por estafar 200.000 euros a través de tarjetas de clientes usadas para alquilar sus apartamentos
- El modus operandi empleado consistía en quedarse con el dinero de las reservas realizadas a través de un portal de internet especializado en alojamientos vacacionales o bien en realizar cargos dobles en una misma reserva
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Granada a un empresario del sector turístico, un varón de 53 años y nacionalidad española, con antecedentes policiales por hechos similares, como presunto autor de un delito de estafa, tras haber utilizado numerosas tarjetas bancarias pertenecientes a clientes que habían reservado los apartamentos de su empresa turística, apropiándose de cerca de 200.000 euros.
Los hechos se remontan al mes de noviembre del pasado año, cuando el responsable de una sucursal de una entidad bancaria del centro de la ciudad presentó una denuncia en la que se planteaba la posibilidad de la existencia de un posible delito de estafa cometido presuntamente a través de un datáfono/TPV vinculado a la cuenta de una empresa de alquiler de apartamentos. El presunto autor, responsable de dicha empresa habría realizado cerca de 2.000 operaciones con distintas tarjetas bancarias, habiendo sido la mitad de ellas rechazadas por dicha entidad. Esta actividad se encontraba relacionada con la gestión del alquiler de apartamentos vacacionales, los cuales se ofertaban en exclusiva a través de una conocida y popular página de internet dedicada a promocionar alojamientos para vacaciones y otros servicios vinculados al ocio.
El presunto autor habría actuado entre los meses de junio y octubre del pasado año de diferentes maneras, pero todas ellas con la finalidad última de hacerse con el dinero de las reservas. Uno de los sistemas empleado habría sido, una vez formalizada la reserva a través de internet por parte de un cliente, el cobro de la misma antes de que llegase la fecha de entrada al apartamento alquilado, incumpliendo los acuerdos de la propia reserva en cuanto a la política de cobros. Otro modus operandi utilizado presuntamente habría sido el efectuar un cargo con el doble del importe real en la reserva de un mismo cliente. Es más, en alguna ocasión se detectó que se habían cargado distintos importes en tarjetas de clientes antiguos, no obedeciendo estos cargos, en modo alguno, a reservas reales.