El alcalde afea al Gobierno su tesis «poco creíble» para mantener a Granada en fase 1
- Salvador ha calificado como «un cinismo y una hipocresía absoluta», que el presidente del Gobierno «diga que empatiza con el sector turístico granadino, cuando está tomando decisiones que perjudican gravemente a este sector
El alcalde de Granada, Luis Salvador, ha acusado al Gobierno de «perjudicar claramente» a las provincias granadina y malagueña, «sin importarle nada más allá que mantener una tesis que en todo momento ha sido muy floja y poco creíble».
El regidor ha dicho además que, «en este momento, hay dos provincias andaluzas que se encuentran en situación de desventaja con respecto al resto», en una rueda de prensa telemática en que ha vuelto a exigir el pase de Granada a la fase 2 del plan de desescalada del Gobierno «lo antes posible»
Tras resaltar que la Junta de Andalucía ha venido manteniendo que Granada y Málaga «reunían todos los requisitos para avanzar de fase», el primer edil ha explicado que la administración autonómica no sólo plasmó esta petición en el informa presentado al Gobierno, sino que «incluso hubo una carta personal» del consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, al ministro de Sanidad, Salvador Illa, en el mismo sentido.
Con este aval autonómico, al que se sumó también la petición del Ayuntamiento, Salvador ha mostrado su extrañeza «al encontrarnos nuevamente con la sorpresa de que el ministro dice que Granada y Málaga no avanzan de fase y se vuelve a inventar otro argumento para justificar una decisión floja y difícil de mantener. Se inventan que hay que pasar 14 días de cuarentena entre fase y fase, independientemente de que se reúnan los datos para el pase».
Salvador, quien se ha mostrado «en total desacuerdo con un argumento que no se creen ni ellos», ha recordado que el domingo por la tarde «el propio Gobierno -en ese digo y desdigo- volvió a decir que se estaban planteando que determinadas ciudades, provincias y comunidades, pasasen de fases sin respetar los plazos de 14 días que antes parecían imprescindibles. Lo grave es que para entonces, el daño a nuestros hostelero y a nuestros empresarios ya estaba hecho».
Ante estos hechos, Salvador ha acusado al Gobierno de cometer una «absoluta injusticia» con Granada y Málaga, cuya reputación como destinos turísticos seguros está siendo «gravemente dañada y lo están haciendo conscientemente», ha dicho. El alcalde, ha afirmado además que los criterios aplicados por del Ministerio de Salud han sido «discreciones con aquellos que ellos consideran que les interesan como gobierno». En este sentido, se ha referido a «la presión que ha recibido por parte de otras comunidades, también eminentemente turísticas», que sí han progresado de fase.
Como conclusión, y tras incidir en que Granada debe pasar de fase cuanto antes, Salvador ha calificado como «un cinismo y una hipocresía absoluta», que el presidente del Gobierno «diga que empatiza con el sector turístico granadino, cuando está tomando decisiones que perjudican gravemente a este sector y de una manera que no se justifica con ningún argumento científico ni de peso».
