El catedrático de la UGR Manuel Gurpegui recibe el reconocimiento a toda su trayectoria por parte de la Sociedad Española de Psiquiatría
- “He querido contribuir a aportar luz para la mejor comprensión de la depresión, el trastorno bipolar y la esquizofrenia”, afirma el psiquiatra
- El acto homenajeó la carrera científica e investigadora del doctor
El catedrático de la Universidad de Granada Manuel Gurpegui Fernández de Legaria ha sido galardonado con el Premio a la Trayectoria Profesional en Psiquiatría de la Sociedad Española de Psiquiatría (SEP) en un acto celebrado con motivo de la Sesión de Apertura del XXIII Congreso Nacional de Psiquiatría.
El director del Departamento de Psiquiatría de la UGR recibió la noticia “con alegría y satisfacción, a pesar de que nunca he trabajado pensando en un premio como este”, declara. La candidatura que presentó su compañero y colaborador Luis Gutiérrez Rojas supuso el voto unánime del Comité Ejecutivo de la SEP “en razón de sus méritos académicos, científicos y profesionales a lo largo de su ejercicio profesional”.
Manuel Gurpegui comenzó su andadura a los 22 años al licenciarse como médico. El campo de la Psiquiatría lo atrajo desde un primer momento y, aunque su tesis doctoral se enmarcara en la psicofarmacología experimental, detalla que el resto de su investigación ha sido clínica o epidemiológica, con particular atención a ciertos rasgos de la personalidad y al consumo de sustancias como factores asociados a la vulnerabilidad psicopatológica. “He querido contribuir a aportar luz para la mejor comprensión de la depresión, el trastorno bipolar y la esquizofrenia”, subraya.
Una de las mayores trabas que enfrenta su especialidad es la mitificación de la salud mental con bulos y estigmas. “Los prejuicios son la antesala de la discriminación social, por lo que conviene que la gente sepa que cualquiera de nosotros puede sufrir un trastorno psiquiátrico”, 1 de cada 5 especifica, “y que la mayoría de las personas que lo sufren pueden recuperar la vida normal o sobrellevarlo”. Por ello, añade que el ingrediente imprescindible para una mejora social en la sensibilización de esta problemática es una correcta información dada por la colaboración proactiva entre los profesionales que atienden a los pacientes y los medios de comunicación para hacerle llegar a la población una visión rigurosa.
Profesor en varias asignaturas del grado en Medicina de la UGR y siempre actualizado en las nuevas tecnologías para su buen provecho en la enseñanza, Gurpegui insiste con el conocimiento que da la experiencia a su alumnado en “la importancia de mirar y escuchar al paciente”. “Las futuras generaciones de profesionales médicos tienen delante el reto y la responsabilidad de hacer una buena medicina”, recalca, “y les recomiendo tomar lo mejor de la tradición médica y poner la ciencia y la tecnología al servicio del paciente, de su familia y del conjunto de la sociedad”.
El catedrático de la UGR reconoce que su jubilación no está muy lejos, pero eso no quita sus ganas por seguir siendo parte de la acción investigadora y educativa. Además, tiene varios artículos científicos pendientes de publicación y está pensando en escribir un libro dirigido a la población general.
Envuelto en los profundos análisis que conlleva la disciplina a la que ha dedicado toda una vida, intuye que en el futuro de la Psiquiatría hay un claro desafío científico y organizativo: “En cuanto al científico, lo veo en seleccionar con precisión el tratamiento específico -biológico o psicosocial- atendiendo también a la singularidad del individuo para que la respuesta terapéutica sea predecible al máximo, y en cuanto al organizativo, consiste en hacer accesibles, en los tiempos apropiados, los cuidados a todas las personas y a todas las familias, elementos de un gran recurso de apoyo y promotora de salud, pero también puede ser origen de tensiones y escenario de conflicto”.