El equipo de gobierno anuncia una «delicada» situación económica municipal
- El equipo de gobierno promete un presupuesto municipal «sin vender nubes en el cielo y que sea el mejor para los granadinos» de cara a 2020
El gobierno municipal ha alertado de una deuda de 270 millones de euros en las arcas de la casa consistorial desde el pasado 30 de junio. Una de las causas sería el retraso en el pago a proveedores, datado en 208’8 días, que ascendería a 90 millones de euros. Desde el gobierno acusan a la gestión anterior de Francisco Cuenca de «taponar las vías económicas municipales», paralizando así la ciudad de Granada durante los últimos tres años y permitiendo la inflación de este déficit.
Además, el otro causante serían los 180 millones de euros que el Ayuntamiento debe a las entidades bancarias. El concejal de Economía y Urbanismo, Luis González, promete acabar con esta deuda financiera en un plazo de seis años, por lo que el actual gobierno necesitaría , o al menos tan sólo la formación del edil (el Partido Popular), una prórroga de su mandato a partir del año 2023 para poder llevar a cabo esta promesa.
Para paliar este déficit el equipo de gobierno propone una serie de medidas. Entre otras, subrayan la necesidad de modificar el actual plan de ajuste o elaborar un presupuesto municipal que sea efectivo y eficaz de cara al año 2020. También tendrían en mente un sistema de compensación para las empresas municipales, reorganizar las áreas del Consistorio para mejorar la eficiencia del servicio o digitalizar por completo los servicios municipales. El edil de Hacienda e Informática, José Antonio Huertas, propone subir el nivel recaudatorio municipal de Hacienda en la capital, «No significa aumentar los impuestos a los granadinos» , – aclara rápidamente el concejal – sino que «desde el año 2016 ha habido una bajada sustancial del nivel de recaudación de Hacienda». En 2015, se habrían recaudado un total de 23 millones de euros, mientras que en el último año la cifra habría descendido hasta 15 millones. «Esto supone una bajada del 30%». Huertas acusa al anterior gobierno socialista de «no gestionar suficientemente bien algunas áreas municipales», provocando que la recaudación no se haya mantenido, sino que haya descendido.
Ambos ediles afirman que ya se trabaja para «no continuar con un presupuesto prorrogado en 2020». Huertas aclara que presentarán un presupuesto en un futuro pleno que cuente con el consenso de todas las formaciones políticas que componen la corporación municipal. Un presupuesto «real, que se ajuste a la situación complicada actual del Ayuntamiento y alcanzable».
