El PP denuncia la falta de planificación y la improvisación del gobierno de Cuenca durante el Plan de Navidad
- El edil critica la “improvisación de servicios durante todas las fiestas” y el “abandono por completo de la vigilancia de la venta ambulante ilegal en zona centro y Plaza Nueva”
El Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Granada ha denunciado el «estrepitoso» fracaso del Plan Reno de Navidad, provocado, en gran parte, por la carencia de agentes de la Policía Local, lo que ha conllevado a una improvisación de servicios durante todas las fiestas, al abandono del control de la venta ambulante, a la escasez de vigilancia en los barrios, además de a un estado caótico del tráfico en Granada.
Así lo ha comunicado el portavoz del PP en el Consistorio de la ciudad, César Díaz, quien ha criticado “un incremento muy notable de horas extras de la Policía Local, un hecho sin precedente” y ha señalado que “se han invertido más de 2.500 horas desde que comenzara el Plan de Navidad que, como denunciaban los sindicatos, muchos de esos requerimientos de servicios extras no se han publicado en sus correspondientes órdenes””.
El edil del PP ha desgranado que “el sábado día 11 se dispusieron de 135 horas extraordinarias; el sábado 18, de 165 horas extraordinarias; y la Cabalgata se lleva el premio gordo, con 171 horas extras de servicios nocturnos y festivos”. Díaz ha recordado“aquella frase que decía no emplearemos horas extras en servicios estructurados, una frase de la concejala de Seguridad Ciudadana, Raquel Ruz, y léase la propia Cabalgata, un servicio que se sabe cada año”.
En este balance del Plan Reno de Navidad, que se activó el 3 de diciembre y permanece activo hasta el 8 de enero, se explicó por parte del gobierno municipal socialista que el dispositivo contaría con unos 5.500 servicios policiales y que este Plan Reno buscaba el cumplimento de las normas en el ocio nocturno; en segundo lugar, pretendía conseguir que el tráfico, principal competencia de la Policía Local, fluyera con normalidad, especialmente en las zonas comerciales; y, como novedad, la presencia de puntos de verificación de control voluntario del consumo de alcohol, pero “tal y como ha transcurrido, parecería una ‘fake new’ impulsada por el propio Ayuntamiento”, según ha dicho el portavoz popular, quien, sin embargo, ha querido “destacar la profesionalidad de nuestra policía, que ha evitado que más de un día podía haber sido un colapso de nuestra ciudad”.
Como muestra de la falta de planificación por parte del equipo de gobierno socialista, el concejal popular ha manifestado que “muchos granadinos y visitantes se han visto atrapados, como en una ratonera, sin poder salir de los aparcamientos públicos y sin poder moverse en el mismo centro de la ciudad, el cual ha estado muy al borde del colapso muchos días la de Navidad”.
Esta falta de agentes municipales, ha añadido Díaz, ha hecho que se vea “mucha improvisación de servicios durante todas las fiestas”, dejando en el abandono a muchas zonas de la capital, como los barrios. “La Policía de Barrio ha escaseado debido a que los agentes se han replegado en el centro, ante la falta de efectivos”, ha aseverado el edil popular. Además, según el concejal, la carencia de patrullas de la Policía Local ha desembocado en el “abandono por completo del control de la venta ambulante ilegal callejera, especialmente en la zona centro y Plaza Nueva”. El edil ha subrayado que “hasta bien avanzada la Navidad, la falta de agentes patrullando el Centro Comercial Histórico lo han convertido en una yincana urbana, donde los manteros y la venta callejera ilegal ha tomado nuestras aceras” y ha acusado a alcalde de Granada, Francisco Cuenca de que, “si esta es su manera de apoyar al comercio tradicional, mejor no decir nada” y ha agregado que “lo mejor que puede hacer es estarse quieto y dejar que los propios comerciantes resuelvan sus problemas por sí solos”.
Otro aspecto que el portavoz popular ha destacado como fracaso del Plan Reno de Navidad ha sido el tráfico, cuyo estado “ha sido caótico debido a la falta de agentes suficientes para su regulación y desvío, sobre todo por las tardes, en las vísperas de días festivos”. El mismo alcalde se vio obligado a anunciar cortes de tráfico, por la gran afluencia de personas en el Centro Comercial Histórico, tomaba parte en las decisiones que se adoptaban y cortaba el tráfico en el eje Gran Vía-Reyes Católicos” ha aseverado Díaz.
Esta carencia de efectivos policiales también se ha trasladado hasta el ámbito de la seguridad ciudadana y vial, puesto que “los controles preventivos voluntarios de alcoholemia y de drogas han brillado por su ausencia y tan solo se ha dictado una orden al respecto para una semana, de la que solo se pudieron cumplir unos cuantos días, de nuevo por la falta de agentes”, ha expuesto César Díaz.
En definitiva, ha resumido el portavoz popular, “hemos sido víctimas de la improvisación de servicios, reforzando sin previsión alguna, sin la oportuna planificación, achicando aguas según se hundía el barco”.
Este panorama de falta de agentes de Policía Local para el plan Reno, cuya labor solo ha podido intentar acometerse con una carga excesiva de horas extras, “afortunadamente no ha causado males mayores”, ha dicho César Díaz, quien ha explicado que “los policías que intervinieron en la Cabalgata se vieron sobrepasados y algunos tuvieron hasta cuatro e incluso cinco puntos asignados para el control de la misma, lo que es una auténtica barbaridad”.
Díaz se ha alegrado que “solo la profesionalidad de la Policía Local ha podido evitar un auténtico colapso de tráfico, ante la nefasta organización del gobierno municipal socialista”
Por el último, el portavoz popular ha resumido que “las situaciones de riesgo y de peligro entre peatones y vehículos han sido constantes, hasta que el alcalde decide tomar las riendas del área de movilidad y cortar el eje Gran Vía-Reyes Católicos, pero esa cantidad de horas extras que hemos usado ha lucido poco, porque las han dedicado a cubrir los turnos de noche, por lo que se han podido dedicar a hacer controles en el ocio nocturno, pero sí han tenido que abandonar otros servicios como la policía de barrio, el tráfico y como el auténtico desmadre que ha vivido el comercio de nuestra ciudad, con una venta ambulante ilegal presente en todas las calles del centro”.