Jóvenes con síndrome de down podrán hacer prácticas en la Delegación de Igualdad para mejorar su inserción sociolaboral
El delegado de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación en Granada, Manuel Montalvo, junto a la presidenta de la Asociación Síndrome de Down “Granadown”, María del Pilar López, han presentado el acuerdo firmado entre ambas entidades para la realización de prácticas de empleo para personas con discapacidad intelectual que tengan síndrome de down. El objetivo de este convenio es establecer las condiciones de colaboración necesarias para la realización de dichas prácticas por parte del alumnado integrante del programa de formación e inserción socio-laboral que se lleva a cabo en la asociación Granadown.
Durante su intervención, Manuel Montalvo ha aclarado que este programa de formación e inserción socio-laboral tiene como finalidad lograr la integración de las personas con discapacidad intelectual en este ámbito mediante su capacitación para el desempeño de un trabajo futuro. Esta iniciativa está orientada a la adquisición de habilidades prelaborales a través del aprendizaje de tareas básicas para el empleo, al desarrollo de las capacidades de estas personas y a la mejora de sus habilidades personales y sociales. “Queremos ayudar a preparar a jóvenes con discapacidad para su incorporación a la vida activa, en el desempeño de diferentes puestos de trabajo, y en función de sus capacidades e intereses”, aclara.
Es por esto por lo que, como asegura Montalvo, “es de sumo interés el establecimiento de líneas de cooperación que, a través de sus respectivos recursos, puedan mejorar la capacidad socio laboral y la cualificación profesional del alumnado que integra el programa de formación e inserción para el empleo de la Asociación Granadown, cuyas prácticas se realizarán en dependencias de la Delegación Territorial de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación en la provincia de Granada”.
Destaca, además, que “la experiencia demuestra la importancia y necesidad que tanto para personas con discapacidad como sin ella supone poder adquirir y demostrar habilidades de tipo práctico preparatorias a la etapa profesional. Vivencias de este tipo contribuyen a minimizar las dificultades que este colectivo de personas encuentran para acceder al mercado laboral”, concluye.
Por su parte, María del Pilar López ha destacado la apuesta que hace la Delegación de Igualdad de Granada para que las personas, en este caso con síndrome de down, tengan la mayor calidad de vida posible y sean un miembro más de la sociedad. “Quiero materializar este agradecimiento en el delegado, en Manuel Montalvo, porque desde que llegó a esta institución, a pesar de la pandemia, siempre nos apoya y está pendiente de nuestro devenir”, continúa. Fue hace aproximadamente veinte años, asegura la presidenta, cuando la asociación comenzó a apostar por llevar a cabo un programa de inserción sociolaboral para las personas que tuvieran esta condición en empresas ordinarias. “Creemos que dentro de la inclusión es donde ellos se pueden desarrollar mejor y así lo ha demostrado la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, que defiende que esta es la ruta”.
Desde Granadown y siguiendo este modelo, trabajan en buscar perfiles laborales acordes a las capacidades de los usuarios de la asociación y brindarles todos los soportes y ayudas que precisen. Para ello llevan a cabo una metodología basada en el empleo con apoyo mediante la cual explican al resto de compañeros de la empresa en la que la persona de esta condición va a trabajar cuáles son sus capacidades con el objetivo de no sobreprotegerlo o infantilizarlo.
El número total de plazas para prácticas es de seis y se distribuirán entre los Centros de Participación Activa de la provincia adscritos a la Delegación de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación. Las tareas que se llevarán a cabo estarán dirigidas a trabajos de jardinería, administrativas o de ordenanza o a aquellas que pueda demandar la delegación territorial y en todas ellas los y las participantes se deben comprometer a realizarlas según las directrices y a cumplir con los horarios establecidos.
Para el correcto desarrollo del trabajo, cada alumno y alumna dispondrá de dos tipos de tutores que apoyarán las prácticas enmarcadas en el convenio. Por un lado existirá un supervisor del centro, servicio, departamento o área de prácticas de la Delegación que se encargará de dar información a los y las alumnas y de definir y hacer seguimiento de sus tareas. Por otro lado también dispondrán de un tutor o tutora laboral responsable del programa de prácticas de la asociación que coordinará, apoyará y asegurará la buena marcha del trabajo que se va a desarrollar.
El periodo de prácticas estará comprendido entre el 1 de octubre y el 30 de junio del año en curso y tendrá una duración mínima total de 5 horas al día y entre sus funciones nunca estarán contempladas tareas que sustituyan las de los empleados y empleadas públicas ni que interfieran en su actividad diaria.
Esta iniciativa ha sido acogida con gran entusiasmo tanto por el personal de los Centros de Participación Activa como las personas mayores usuarias de los mismos ya que los jóvenes presentan una alta motivación personal y profesional dando muestras en poco tiempo de la calidad y eficacia de su trabajo y del afecto y respeto de todas las personas con las que comparten su jornada laboral.
La vigencia del presente Convenio será de cuatro años desde la fecha de su firma, pudiéndose acordar unánimemente su prórroga por cuatro años adicionales.