Junta defiende que era una «obligación» acabar con el «mal funcionamiento» en venta de entradas a la Alhambra
- La nueva normativa responde a los «criterios de transparencia, legalidad y consenso institucional», dando cumplimiento a las recomendaciones de la Agencia de Defensa de la Competencia de Andalucía
La consejera de Cultura y Patrimonio Histórico, Patricia del Pozo, ha manifestado este martes que era una «obligación y responsabilidad» resolver «el mal funcionamiento» en el sistema de venta de entradas de la Alhambra de Granada, y ha defendido que la nueva normativa al respecto «responde a los criterios de transparencia, legalidad y consenso institucional».
Así se ha pronunciado Del Pozo en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, donde ha recalcado que «el mal funcionamiento del sistema de venta de entradas de la Alhambra era una situación que teníamos la obligación y responsabilidad de resolver» desde el Patronato de ese conjunto monumental, el cual ella preside.
De hecho, el pasado miércoles 15, el pleno extraordinario del Patronato de la Alhambra y el Generalife aprobó con el consenso de todas las instituciones la nueva normativa de visita pública, comercialización y otros usos públicos del monumento y sus bienes adscritos, según ha destacado Del Pozo.
Ha añadido que la nueva normativa responde a los «criterios de transparencia, legalidad y consenso institucional», dando cumplimiento a las recomendaciones de la Agencia de Defensa de la Competencia de Andalucía, que cuestionó en un informe emitido a comienzos de 2019 el modelo de reparto de entradas en vigor entonces.
Respecto al hecho de que se reproche a la Junta que no haya trabajado directamente esta nueva normativa con el sector, como los agentes autorizados de la Alhambra, Del Pozo ha explicado que el informe de la Agencia de Defensa de la Competencia de Andalucía «recogía expresamente la imposibilidad de negociar con el sector la nueva norma al producirse claramente un conflicto de intereses».
«Lo que no podía ser es que no hubiera nunca entradas para la Alhambra, teniendo un aforo de 2.763.500 personas al año; o que se pidieran 700 euros por una entrada a la Alhambra; o que se estuvieran vendiendo entradas para días en los que la Alhambra estaba cerrada o entradas de niños cuando son gratuitas», según ha señalado Del Pozo.
«Era una obligación, además de una exigencia por parte de la Agencia de la Competencia, el modificar esta normativa que daba lugar a este tipo de cuestiones y problemas», según ha señalado la consejera, quien ha querido dejar claro que no todos los agentes han actuado de esta manera, «pero estos problemas se estaban dando desde hace muchísimo tiempo». Ha insistido en que el Patronato no tenía más remedio que actuar.
El nuevo sistema de venta de entradas, en el que desaparece la reserva previa de los agentes autorizados y se establece la compra directa, se ha diseñado velando por el interés general, respetando de forma estricta las normas de competencia y atendiendo a la buena regulación económica.
La consejera ha recalcado que en el diseño del nuevo sistema se han dirigido todos los esfuerzos para acabar con esa imagen de entradas siempre agotadas y con las denuncias por supuesta reventa y acaparamiento que tanto perjudica el destino Granada y la imagen del conjunto monumental.
Del Pozo ha informado de que, con este nuevo sistema, se prevé que el visitante pueda planificar su visita a la ciudad y al monumento con más antelación y aumente su tiempo de pernocta, que es uno de los objetivos de la actual dirección del monumento granadino, de forma que se puedan ver beneficiados tanto el visitante como las agencias, al tener la opción de planificar los viajes.