La Andalucía de Juanma
Es cierto que la Andalucía antes de Juanma no era Luxemburgo, quizás por ello miles de andaluces de buena fe confiaron en las promesas del malagueño, según las cuales si votábamos por él, a esta tierra no la iba a conocer ni la madre que la parió, que diría Alfonso Guerra. Es verdad que en su primer intento cosechó los peores resultados de su partido en Andalucía, pero como parece que el caballero es el tipo más afortunado de la política mundial, el PSOE de Susana Díaz, aunque ganó aquellas elecciones de 2018, no lo hizo con el margen suficiente para gobernar y Moreno Bonilla se convirtió en presidente de la Junta de Andalucía, gracias al dudoso honor de ser el primero en meter a la ultraderecha de Vox en las instituciones. Cuatro años después ya sí que arrasó con una mayoría absoluta que dejó a la izquierda catatónica y se supone que le dejaba las manos libres para convertir Andalucía en la tierra de leche y miel que nos había prometido.
Seis años después de su llegada a San Telmo, Bonilla ha impuesto su agenda ideológica que lejos, muy lejos, de traer la prosperidad a Andalucía, nos está hundiendo en un pozo sin fondo que a la luz de los datos objetivos nos coloca en el mismo nivel del Tercer Mundo.
Si en el terreno económico no hay convergencia alguna con España y mucho menos con Europa, en lo social la radiografía es absolutamente demoledora. Andalucía se mantiene a la cabeza de las regiones con peores datos de pobreza en el conjunto nacional. Los datos oficiales reflejan que 3,2 millones de andaluces están en riesgo de pobreza y exclusión social supone alrededor de 174.000 personas más en la tasa de Riesgo de Pobreza, Pobreza Severa y Carencia Material y Social, según último informe sobre ‘El estado de la pobreza en Andalucía” que elabora la Red Andaluza de Lucha Contra la Pobreza y la Exclusión Social.
Este aumento sitúa a Andalucía como la región con la tasa Arope más elevada del conjunto nacional, lo que supone que el 37,5% de la población andaluza esté en riesgo de pobreza y exclusión social en 2023. La cifra es 1,7 puntos superior a la registrada el año pasado.
Un 12,6% de la población en Andalucía se encuentra en situación de Privación Material Social Severa, lo que se traduce en que más de un millón de personas, situando a Andalucía como la región con mayor Privación Material Social Severa de España. Todos los registros en los que se basa ese indicador registran tasas muy superiores a las medias nacionales, donde destaca el aumento de personas que no pueden permitirse mantener la vivienda con una temperatura adecuada, que se duplica en los tres últimos años y pasa del 11,3% en 2020, al 24,2% de 2023″, o las personas que no pueden permitirse una comida de carne, pollo o pescado al menos cada dos días que si en 2021 eran un 6,8 %, en 2023 supera el 10 %. El 57,1 % de la población reconoce dificultades para llegar a fin de mes, lo que supone 2,5 puntos más que el año anterior (56,4%). Todos los datos reflejan un preocupante empeoramiento de los indicadores de pobreza y exclusión social, situándose Andalucía en el primero puesto en las tasas de pobreza y exclusión social, datos que nos alejan de cumplir con los compromisos de la Agenda 2030″.
Igualmente demoledoras son las cifras que inciden en la feminización de la pobreza que llega al 39%, manteniéndose constante la diferencia de 3,0 puntos porcentuales superior en el caso de las mujeres a la de los hombres, mientras que resulta especialmente dramática la tasa de pobreza entre los niños y adolescentes que supera el 42,%, con un incremento de 4,4 puntos respecto a los valores del año anterior siendo el más elevado de todos los grupos de edad, lo que demuestra que en Andalucía a menor edad, mayor riesgo de estar en situación de pobreza.
Los datos muestran a su vez la importancia de las pensiones en la generación de pobreza en Andalucía; de las 1.653.198 pensiones que se reciben en Andalucía, el 43,4%, es decir, más de dos de cada cinco, reciben una pensión cuyo importe no supera el umbral de pobreza, inferiores a 785 euros. En términos absolutos, son alrededor de 718.074 personas, 32.252 personas más que el año anterior. Para el 15,7% del total, el importe de su pensión es inferior al umbral de pobreza severa, o lo que es lo mismo, una renta inferior a 523.
Sumen a todo ello los datos que indican que Andalucía tiene las peores listas de espera de España en sanidad y dependencia y está a la cola de inversión por habitante en salud, educación y servicios sociales y tendremos un retrato de la Andalucía de Moreno Bonilla que solo justifica la sempiterna sonrisa de su presidente en las encuestas que le otorgan cada vez una mayoría más amplia, a pesar del descalzaperros en que tiene sumida a esta tierra.