La Junta estudia la situación de la EDAR de Güejar Sierra
Crespo traslada al alcalde que el objetivo es adoptar la mejor solución y que el diagnóstico de la depuradora estará disponible en el primer semestre de 2020
La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible está realizando un estudio sobre la situación de la EDAR del municipio granadino de Güéjar Sierra, para decidir si es necesario construir una nueva depuradora o si llevando a cabo trabajos de mejora y adecuación es suficiente para garantizar un funcionamiento óptimo y eficiente.
Así se lo ha trasladado la propia consejera al alcalde de la localidad, José Antonio Robles, durante una visita al municipio, en la que Carmen Crespo ha tenido la oportunidad de firmar en el libro de honor del Ayuntamiento y abordar con el primer edil las principales inquietudes de la población.
Crespo, quien estuvo acompañada por el secretario general de Medio Ambiente, Agua y Cambio Climático, Francisco Gutiérrez, y de la delegada territorial, María José Martín, ha asegurado al alcalde güajereño que la solución que finalmente se tome por parte de la Junta “será la mejor para el municipio, para sus vecinos y para el medio ambiente de la comarca”.
“La Delegación Territorial está analizando las causas por las cuales la EDAR tiene un funcionamiento deficiente para poder decidir si procede redactar un proyecto de adecuación y mejora a través del canon del agua, o bien es fruto de un problema de mantenimiento y explotación”, ha explicado la consejera, quien ha señalado que el diagnóstico de la depuradora estará disponible en el primer semestre del próximo año.
Asegurar la depuración de aguas en toda la comunidad autónoma es una de las prioridades del Gobierno de Andalucía y, de forma muy especial, de la Consejería que dirige Carmen Crespo. Los presupuestos de la Junta para 2020, aprobados el pasado jueves en el Parlamento, harán posible poner en marcha 300 actuaciones en saneamiento de aguas a lo largo del próximo ejercicio, gracias a los 330 millones de euros destinados a política hidráulica.
En este sentido, el uso eficiente del canon del agua y la modificación de la ley para poder utilizar estos fondos en el impulso de obras de abastecimiento son dos medidas adoptadas por el actual Gobierno andaluz, con el objetivo de que el dinero que pagan los andaluces en sus recibos del agua se empleen en mejorar las infraestructuras hidráulicas de sus calles, incrementar su calidad de vida y proteger el medioambiente más cercano.