Los sindicatos exigen el test de COVID-19 para los trabajadores de las residencias de mayores

• También reclaman urgentemente el suministro de equipos para evitar un inminente colapso del sistema sanitario

Los trabajadores de las catorce Residencias de Mayores de gestión directa de la Junta de Andalucía necesitan, de forma urgente, disponer de medios de protección para continuar con el cuidado a los mayores residentes en dichos centros. Es lo que han asegurado los sindicatos, que añaden que «el sector de las Residencias de personas mayores atiende a más de 2.000 personas cada día. Las personas de estos centros, son uno de los colectivos más vulnerables al coronavirus, según la Organización Mundial de la Salud».

En una reclamación conjunta llevada a cabo por CSIF, UGT, CCOO, SAF, ISANDALUZA y USTEA se denuncia que actualmente los trabajadores de estos centros «son una barrera capaz de contener el colapso inmediato del sistema sanitario». Por este motivo, advierten que si no se produce una respuesta responsable por parte de los Gobiernos central y autonómico en el suministro de Equipos de Protección Individual (EPIs) para los trabajadores del sector en las próximas horas, «estaremos abocados a una catástrofe incalculable».

La enfermedad avanza de manera veloz y las organizaciones sindicales quieren seguir participando de manera activa en este reto sanitario, pero afirman que se tienen que abordar diversas cuestiones de manera inmediata. Por un lado, el personal «tiene que trabajar protegido para evitar el contagio y poder seguir atendiendo más personas». Para ello, «necesitamos contar con el test de detección de la enfermedad y con EPIS, equipos de protección individual, como mascarillas, guantes, batas y gafas». Cuando a un trabajador se le detecta alguna infección respiratoria, inmediatamente se le indica que lleve a cabo aislamiento durante 14 días, sin hacerle la prueba, lo que le obliga «a dejar de trabajar». Si se le hiciera, como pasa con el personal sanitario, y se descartara el coronavirus, «podría volver a trabajar de inmediato».

Los sindicatos también recuerdan que el personal sanitario de nuestros centros es esencial para nuestra actividad, y piden el mantenimiento del mismo en los centros. «Si los envían a los hospitales, dejarán de atender adecuadamente a miles de personas que acabarán finalmente saturando los hospitales, lo que acrecentará el colapso en los mismos, que es precisamente lo que se quiere evitar».

Por último, los sindicatos aseguran que en las residencias hay un número elevado de personas vulnerables y sus recursos son limitados. «Si debemos aislar a todas las personas con síntomas pero sin que tengan confirmada la enfermedad, estaremos complicando de manera importante el funcionamiento de la misma, ya que las medidas a tomar serán, de manera preventiva, muy importantes». Por todo ello, exigen al Ministerio de Sanidad y a la Consejería de Salud y Familia de la Junta de Andalucía que informe a los centros residenciales y a sus trabajadores «cuál es la situación real de suministro de EPIs y que haga llegar de inmediato a todos los centros los materiales necesarios de protección -dichos EPIS- para que los profesionales puedan desarrollar su trabajo en condiciones de seguridad».

En segundo lugar, piden que se hagan pruebas masivas de detección de la enfermedad en todos los Centros Residenciales de Mayores, tanto al personal como a los residentes como «medida primordial de prevención y garantía de estabilización de dichos centros». Los centros de mayores «son de especial vulnerabilidad». El personal sanitario de estos centros «es esencial para nuestra actividad». De ahí que deben permanecer en ellos para garantizar la salud de las personas residentes.

«Estamos orgullosos del trabajo que hemos hecho hasta ahora y queremos seguir aportando a la sociedad andaluza toda nuestra capacidad, profesionalidad y colaboración para superar esta situación de alarma que estamos atravesando y que solo lo conseguiremos con la unidad de todos», han sentenciado.