Marín: «Espero que se puede repetir este gobierno de PP y Cs otros cuatro años porque se ha puesto de moda ser moderado»
El vicepresidente de la Junta de Andalucía y coordinador de Cs en la región, Juan Marín, expresa cuál es la hoja de ruta de su partido para las elecciones al Parlamento de Andalucía de 2022 ante la hipótesis de que el PP sea entonces la primera fuerza.
«Yo voy a intentar ganar las elecciones si soy el candidato de mi formación política y si es otro compañero lo ayudaré a ganar las elecciones», afirma de entrada Marín, antes de trasladar que «lo que espero es que se pueda repetir, y lo digo con total honestidad y sinceridad, este gobierno de Partido Popular y de Cs, que necesita otros cuatro años para acabar con todas las reformas y poner a Andalucía donde siempre tuvo que estar».
«Lo digo abiertamente y no me escondo», apostilla Marín durante una entrevista con Europa Press.
Preguntado si la aspiración de Cs se encamina a ser un partido bisagra en la política andaluza, Marín responde que «llevo varias semanas o varios meses ya escuchando lo mismo. Yo creo que se ha puesto de moda ser moderado, se ha puesto de moda ser de centro y estoy totalmente convencido».
La contribución de Cs al mapa político andaluz la sitúa muy clara Juan Marín. «Somos los únicos que garantizamos que Vox no vaya entrar en el Gobierno de la Junta de Andalucía y que no entrará Podemos. Lo hicimos con Susana Díaz y lo hemos hecho con Juanma Moreno».
«Nuestras cartas están encima de la mesa, pero ¿y los demás en qué están pensando?», prosigue reflexionando el vicepresidente de la Junta y coordinador de Cs para aventurarse a trazar un escenario donde dice: «no me quiero ni imaginar un Gobierno como el de Sánchez aquí en Andalucía dirigido por el señor Espadas repartiendo por ahí, ni tampoco me quiero ni imaginar al señor Moreno Bonilla en manos de Vox diciéndole no a políticas sociales, igualdad, violencia de género».
«Por eso somos imprescindibles para que estas reformas salgan adelante», concluye Marín su razonamiento.
«Nos queda un año y poco más de legislatura y espero que todo el mundo se posicione igual de claro», afirma en referencia sobre el resto de fuerzas y el ejercicio de poner las cartas boca arriba encima de la mesa antes de que el electorado se sitúe ante las urnas. «Cuando tú vayas a echar la papeleta que sepas lo que estás votando y a quién estás votando y lo que va a pasar», prosigue explicando.
«A los que empiezan a perder fuelle les interesará probablemente las elecciones», apostilla Marín, quien seguidamente afirma que «vamos a seguir trabajando Partido Popular y Ciudadanos, vamos a agotar la legislatura porque nos votaron para cuatro años, no para tres ni para dos. Vamos a poner en marcha en 2022 todos los recursos que nos llegarán de Europa y vamos a hacer las políticas que dijimos que íbamos a hacer».
El vicepresidente andaluz ironiza entonces sobre los giros que atribuye al resto de líderes políticos andaluces dentro de una aspiración generalizada de seducir al votante de centro.
«Veo a Juanma Moreno más moderado y que quiere ser de centro derecha, pero de centro. Veo ahora a Juan Espadas que también quiere ser muy moderado y también quiere ser de centro izquierda. Yo creo que al final es que Ciudadanos ha puesto de moda ser moderado».
Cuestionado sobre ‘el abrazo del oso’ del PP en un Gobierno de coalición, Marín reconoce que «soy consciente de que el PP tiene la Presidencia de la Junta y que, evidentemente, mediáticamente tiene un peso que nosotros no tenemos, pero independientemente de eso también soy consciente de que los andaluces saben perfectamente por qué se están produciendo estas reformas y estos cambios. Y no solamente eso, sino que además le siente bien a Andalucía».
Marín se vale de una metáfora política para poner de manifiesto la ventaja que lleva el PP sobre Cs en términos de imagen ante el electorado.
«Las cintas en la inauguración siempre las corta el alcalde, los que venimos de la política municipal lo sabemos. En una empresa los triunfos son del jefe. Cuando hay algún fracaso se despide a algún cargo intermedio y esto ocurre en la vida real y en la política, igual», explica Marín sobre la desventaja con que llegará Cs a las elecciones.
En su defensa de la contribución de su partido al tablero político y la gobernabilidad de Andalucía, el vicepresidente de la Junta y coordinador de Cs esgrima que «Ciudadanos le sienta bien a Andalucía y lo hemos visto en muy poco tiempo. Lo vimos en tres años y medio que estuvimos en la oposición y lo hemos visto en dos años y medio que llevamos en el gobierno. Otros llevan 41 o 42 años y todavía no han conseguido ni un cambio».
Si es Cs el partido menos interesado en un adelanto de las elecciones andaluzas, Marín replica que «creo que no le interesan a los andaluces, no a Ciudadanos». «¿Alguien piensa que le puede interesar a Andalucía unas elecciones? Yo es la pregunta que me haría. Y segundo, ¿por qué hay que adelantar unas elecciones? ¿Hay algún imputado en este Gobierno? ¿Hemos hecho algo que dijéramos que no íbamos a hacer?», se ha preguntado Marín de forma retórica.
«Dijimos que íbamos a bajar los impuestos y los hemos bajado; dijimos que íbamos a simplificar la administración y lo hemos hecho; dijimos que íbamos a hacer auditorías y las hemos hecho», relata sobre la contribución de PP y de Cs. «¿Alguien piensa que cuando un gobierno hace lo que tiene que hacer es el momento de convocar elecciones? Probablemente le interese a otros», se responde Marín como corolario de su razonamiento.
Mientras reivindica que el votante que opte por Cs será consciente de qué estará votando en caso de que elija la papeleta de este partido «porque no nos hemos movido ni un milímetro» y esgrime aquí incoherencias del pasado como el hecho de que «el PP votó en contra en la anterior legislatura cuando yo lleve el mínimo exento del millón de euros para el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. Y ahora resulta que el Partido Popular es el que ha eliminado Sucesiones en Andalucía. Pues no».
El vicepresidente de la Junta admite entonces que «a lo mejor políticamente no sabemos venderlo y somos mejores gestores que vendedores, cierto», y abre una puerta al optimismo para blandir que «a la gente yo las veo mucho más contenta que antes, así que tenemos que estar aquí porque nos hemos puesto de moda».