No sostenella y sí enmendalla
Hace dos semanas advertía en esta misma columna, de la frustración que nos producirían los presupuestos de la Junta de Andalucía para la provincia de Granada y como uno no es mucho de «sostenella y no enmendalla», vaya en estas líneas mi rectificación, ya que lo que hemos conocido del proyecto de presupuestos andaluces, es mucho más positivo para esta tierra que los generales del Estado, que vuelven a ningunear a Granada, tal y como hace dos semanas argumentamos en estas mismas líneas.
Si yo estuviera en la piel de Paco Cuenca, que afortunadamente para mi no es el caso, estaría seriamente preocupado, ante la desatención presupuestaria de que Granada es objeto, por una administración gobernada por su partido, frente al músculo que exhiben, al menos sobre el papel, las cuentas andaluzas que comanda el PP.
Si tenemos en cuenta que en dos años tendremos elecciones municipales y que la máxima oponente de Cuenca, será casi con toda seguridad, la actual consejera de Fomento de la Junta de Andalucía, Marifran Carazo, el demoledor contraste para Granada entre las cuentas nacionales y autonómicas, hacen un flaquísimo favor al actual alcalde y al partido al que representa, que parece no percatarse de que si en las dos últimas ocasiones, ha sido el beneficiario de una extraordinaria carambola, que le ha dado la alcaldía, difícilmente esa conjunción astral volverá a repetirse por tercera vez.
De ejecutarse estos presupuestos, supondrían 346 millones en inversiones para la provincia, incluyendo fondos europeos, lo que sin duda es un buen punto de partida para la reactivación de esta tierra después de la pesadilla de la pandemia.
De los proyectos recogidos en las cuentas andaluzas, destacan los destinadas al Metro de Granada, con partidas para iniciar la posible ampliación, acometer obras compensatorias pendientes y comprar nuevos trenes. La Junta calcula en 77 millones, el dinero previsto en las cuentas para el Metropolitano, incluyendo en esa cifra los gastos de explotación y el pago del crédito y además confía en recibir también más dinero para esta infraestructura, a través de los Fondos Next Generation, para los que la consejería de Fomento ha solicitado 90 millones.
Solo los presupuestos de la consejería de Fomento, de la que es titular, la que será candidata del PP a la alcaldía de Granada, prevén 106 millones para la provincia, lo que representa un 25 por ciento más que el pasado año. De ese montante, en el que se incluyen fondos europeos, 93 se destinarán a infraestructuras -fundamentalmente carreteras- y 13 a viviendas.
El proyecto de presupuestos andaluces destina al turismo en la provincia un 26’4 por ciento más en 2021, permitiendo el impulso al Plan de Turístico de Grandes Ciudades, con 2,2 millones de euros, y a Cetursa-Sierra Nevada, con más de 30 millones, a través de fondos Feder, conseguidos por la tramitación de 18 expedientes para ahorro energético y sostenibilidad.
En materia de justicia los presupuestos pueden ser «los de mayor inversión de la historia de la provincia», según la Junta de Andalucía, con 12,7 millones para digitalización e informatización; 660.000 euros para la nueva sede de Órgiva; 1,1 millones para el acondicionamiento de la sede de Caleta; y 100.000 euros para la rehabilitación de Fiscalía.
Si bien es cierto que las cuentas andaluzas son manifiestamente mejorables, en asuntos tan importantes para Granada, como es el apartado relacionado con la Universidad, no lo es menos que siendo mínimamente objetivos, son bastante más positivas para esta tierra, de lo que apuntan las de los presupuestos generales del Estado.
Añadan a todo lo anterior, el mazazo recibido ayer por parte de la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, quien ante 1.300 empresarios de todo el país, reunidos en Madrid para denunciar los continuos retrasos en el proyecto del Corredor Mediterráneo, confirmaba que dicha infraestructura, al menos en su tramo desde Almería hasta la frontera francesa, entrará en funcionamiento a partir de 2025 o, como muy tarde, a partir de 2026. Ni una palabra de su paso a través de Granada, lo que llevaba al presidente de la Confederación de Empresarios, Gerardo Cuerva, a mostrar su preocupación por la inexistencia de un proyecto para la conexión con Almería que ni está ni se la espera, al menos hasta la próxima década; lo que ha llevado a Cuerva a pedir a los representantes políticos de Granada «un compromiso definitivo, gobierne quien gobierne, con esta infraestructura», fundamental por otra parte para el futuro de nuestra provincia.
Es por todo lo anterior, por lo que el alcalde de la muy noble, muy leal, nombrada, grande, celebérrima y heroica ciudad de Granada, no debe estar muy «contento» ante el contraste de las cuentas para Granada, presentadas por los «propios» en los presupuestos generales del Estado, frente a las anunciadas por los «ajenos» de la Junta de Andalucía y es que como dijera el ministro franquista Pío Cabanillas: «Cuerpo a tierra, que vienen los nuestros».