¡Qué bochorno señora consejera!
En el complicado mundo de la vida pública hay declaraciones que marcan de por vida al prócer que las hace. Unas por su brillantez, otras por su oportunidad, algunas por su empatía y otras por todo lo contrario. Es el caso de la consejera de Inclusión Social y Familias de la Junta de Andalucía, Dolores López, “Loles” para los amigos, que en unas de las manifestaciones más desafortunadas que conozco, y créanme que he tenido la oportunidad de conocer unas cuantas, vino a decirles a los andaluces que llevan esperando casi dos años para poder acceder a la prestación por la dependencia que padecen, que literalmente le importa una higa su tiempo de espera, porque como su “gestión” está siendo tan “brillante”, aunque esa demora se incremente otro año más, aquí no pasa nada.
Con consejeras como “Loles”, la verdad es que “Juanma” no necesita oposición, porque ya se la hace ella solita. La misma semana en la que decenas de miles de andaluces se han echado a las calles de sus ciudades en protesta por la desastrosa gestión que de la dependencia está haciendo el Gobierno de Moreno Bonilla, va doña Loles, y más chula que un ocho se pone estupenda en el programa de Canal Sur ‘Despierta Andalucía’, donde, por sorprendente que parezca, aseguró, en relación, con el lapso de tiempo que aguardan por promedio las personas dependientes en el territorio hasta que reciben atención, que no le importan que suban los 609 días, “como si se va a 900 días si es porque estoy atendiendo a personas que llevan más de tres años esperando”.
Se le olvidó a doña Loles recordar que esos 609 angustiosos días que los andaluces dependientes y sus familias esperan alguna señal de vida de su administración, son casi el doble de lo que se espera en el resto de España, que ya es una barbaridad, que 33 de ellos mueren diariamente esperando una resolución de sus solicitudes y que otros 23.530 aguardan que se haga efectiva la prestación una vez la resolución ha resultado positiva.
También se le olvido a doña Loles que esa alarmante ralentización en la resolución de estas ayudas provocó que solo el año pasado 8.771 andaluces y andaluzas fallecieran en las listas de espera de esta norma. Pese a que las organizaciones de personas mayores han calificado esta situación de la dependencia en la comunidad de “dramática”, doña Loles, ha sacado pecho de su labor frente a esta ley y don Juanma solo hace que intentar tapar semejante desastre echándole la culpa al maestro armero, o sea al Gobierno de Pedro Sánchez y un poquito también a Cataluña.
Intentar tapar el catastrófico trabajo de doña Loles y don Juanma en el Sistema Andaluz de la Dependencia culpando al Gobierno de España, es una historia que ya no cuela, sobre todo porque este colapso está provocado por la caótica gestión del Gobierno andaluz, por las modificaciones de simplificación introducidas en el Sistema sin la información y formación necesaria a los profesionales, por la falta de transparencia de los datos y por su reducción de la financiación.
Las cifras suelen ser muy obstinadas y en este caso dejan a los pies de los caballos a doña Loles y don Juanma, y es que en cuanto a fondos dispuestos para cumplir con la norma, el Ejecutivo liderado por el malagueño ha disfrutado en los últimos seis años de 1.477 millones de euros más, para un total de 2.956 millones, que han llegado desde el Gobierno central, en la etapa de Pedro Sánchez, que los que recibiese Andalucía de manos del anterior gobierno nacional de su compañero de filas Mariano Rajoy, donde la cantidad de fondos estatales destinados para la dependencia andaluza fue de 1.478 millones de euros, o lo que es lo mismo, la mitad de los destinados por el Gobierno socialista.
Pero como datos son amores, bueno es recordar que el año pasado el Gobierno de España aumentó su aportación para el Sistema de Dependencia de Andalucía, un 194% con respecto a 2018, último presupuesto del Gobierno del PP en España, pasando de los 248 millones de euros de Rajoy a los 729 millones abonados a Andalucía en 2023 por Pedro Sánchez.
Aunque no lo crean y ante ese incremento de fondos transferidos desde el Gobierno central, en lugar de volcarse en reducir esa vergonzante lista de espera y esa injustificable demora, la Junta de Andalucía redujo su aportación prevista en el presupuesto, lo que ha supuesto que el Gobierno de España haya pasado del 19,67% al 37,74%, mientras que la administración de don Juamna y doña Loles ha pasado del 80% en 2018 a poco más del 60% en 2023.
Nunca una frase hecha estaba tan justificada: “Datos matan relatos”, Sobre todo “matan” la chulería de la consejera doña Loles, que bien haría en ser un poco más humilde y sobre todo muchísimo más empática, con las sesenta mil familias andaluzas que sufren cada día su incompetencia.
