Suspendido el juicio por tentativa de homicidio en una riña entre familias
El juicio señalado en la sala Antonio Angulo del edificio judicial de Caleta, en Granada, con diez procesados, en el que la Fiscalía ha pedido seis años de prisión y 4.500 euros de multa para un acusado de apuñalar en el abdomen al miembro de otra familia, ha quedado suspendido hasta nueva fecha aún por determinar por errores en la tramitación del proceso.
Así lo han indicado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía en la mañana de este martes, cuando estaba previsto el inicio del juicio, en el que el ministerio público acusa al principal procesado por la presunta comisión de un delito de homicidio en grado de tentativa pues entiende que el apuñalamiento presentó un «claro riesgo» para la vida del agredido en el marco de una riña en Las Gabias, en el área metropolitana de Granada.
Según consta en el escrito provisional de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Europa Press, los hechos que juzga la Sección Primera de la Audiencia Provincial se remontan al 26 de junio de 2015, cuando dos acusados de uno de esos clanes, se cruzaron en su automóvil con un procesado de la otra familia, con la que mantendrían «enemistad manifiesta» desde 15 años atrás.
Este último les habría pedido que se bajaran del vehículo y al no hacerlo supuestamente «comenzaron a discutir» y «cogió un palo que portaba en el ciclomotor» en que iba «y con ánimo de atentar contra los bienes ajenos, comenzó a golpear» el coche.
Entonces, los dos primeros habrían llamado a sus dos hijos, también acusados, uniéndose a la riña cinco familiares del otro, que habría sacado «una navaja que portaba y con intención» de «acabar» con la vida de uno de los vástagos de los procesados que iban en el automóvil «le apuñaló con la misma en el abdomen, le perforó el intestino» y le llevó de este modo a «caer» al suelo «desangrándose».
Fue trasladado al hospital para ser atendido por las lesiones sufridas «que constituyeron un riesgo vital para la víctima». La agresión mutua cesó con la llegada de la Guardia Civil, cuyos agentes «consiguieron separar a los dos clanes familiares que se estaban agrediendo mutuamente con objetos peligrosos».
El principal acusado se enfrenta por la presunta comisión de delitos de homicidio en grado de tentativa, de daños y de riña tumultuaria a penas por un total de seis años de prisión y de 4.500 euros de multa.
Los nueve acusados restantes, entre ellos el herido más grave, se enfrentan a una petición fiscal de un año de prisión cada uno por supuestos delitos de riña.